El más reciente álbum de Eric Clapton, I Still Do, podría ser el último en la carrera del músico, a quien cada vez le cuesta más tocar la guitarra, a causa de una enfermedad llamada neuropatía periférica, que le fue diagnosticada recientemente.
La neuropatía periférica se produce cuando uno o más nervios periféricos del cuerpo dejan de funcionar parcial o totalmente. Las consecuencias pueden ir desde el dolor hasta la pérdida de sensibilidad en las extremidades o en ciertos músculos.
Clapton ya habló en su autobiografía homónima, de 2007 y editada en España por Global Rhythm Press, de cómo superó su adicción a drogas y alcohol. Ahora el músico ha afrontado públicamente el drama de su enfermedad. De hecho, en la entrevista, Clapton se declara sorprendido de seguir con vida: “No sé cómo sobreviví, sobre todo en los setenta. Por alguna razón, fui sacado de la boca del infierno y se me dio otra oportunidad”.
El sitio web oficial de Clapton no incluye de momento la previsión de nuevos conciertos, pero destaca que I Still Do alcanzó el número uno en la lista de Billboard de los álbumes de rock más vendidos, con 44 mil copias. El músico colabora además en el nuevo disco de los Rolling Stones, un álbum de blues que el grupo lanzará hacia finales de este año.
(Con información de El País)