Por lo menos diez personas resultaron intoxicadas, luego dos explosiones registradas en la planta química de Arkema, ubicada en Crosby, en el condado de Harris, Texas.
De acuerdo con reportes de autoridades locales, las instalaciones de la empresa resultaron afectadas por una inundación como consecuencia del Huracán Harvey, lo que provocó que se averiaran los sistemas de refrigeración y prevención de incendios.
La fábrica fue evacuada en su totalidad y los cuerpos seguridad emitieron un alerta para que los residentes se mantuvieran a una distancia de 2.4 kilómetros alrededor de la planta, que procesa peróxidos orgánicos para la producción de resinas plásticas, poliestireno, pinturas y otros productos altamente inflamables.
“Los peróxidos orgánicos son extremadamente inflamables y, según lo acordado con los funcionarios públicos, el mejor curso de acción es dejar que el fuego se consuma”, dijo la compañía, que no descartó más explosiones en las próximas horas.
Respecto a este incidente existen versiones contradictorias; el comisario del condado de Harris, Ed González sostuvo que algunos agentes policiacos sufrieron irritaciones en los ojos, pero insistió que el humo no era tóxico. “No es nada que nos parezca peligroso para la población”, aseguró.
Sin embargo, el titular de la Administración Federal de Manejo de Emergencias (FEMA por sus siglas en inglés), Brock Long, dijo a la prensa en Washington que “sin duda, la nube de humo es increíblemente peligrosa”.
(Con información de AP y EFE)
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