Funcionarios federales y de Sinaloa tuvieron conocimiento, hasta anticipadamente, del operativo para la detención de Ismael Zambada, el Mayo, y Joaquín Loera López, información que les fue proporcionada por dos facciones que integran el Cártel de Sinaloa, reportó Carlos Loret de Mola.
Este jueves Loret de Mola publicó en su columna de El Universal un texto titulado “Caso Mayo Zambada: el gobierno mexicano sabía todo” en el que expone que, al contrario del desconocimiento que ha difundido el gobierno federal durante dos semanas, autoridades federales y locales estaban perfectamente al tanto de lo que ocurría con el traslado del jefe histórico de una de las bandas más importantes del país hacia Estados Unidos, donde fue detenido y ya está siendo sometido a proceso.
Según relata el periodista, grupos internos del Cártel de Sinaloa reportaron a funcionarios de los gobiernos federal (especialmente del Ejército y la Marina) y de Sinaloa lo que ocurriría y lo que ya había sucedido en el caso del Mayo.
Loret afirma que sus fuentes no están ciertas de que el presidente Andrés Manuel López Obrador previamente haya sido informado de lo que iba a suceder con Zambada y Loera López, y ni siquiera inmediatamente después (en el artículo refiere a autoridades de Morena, por lo que esto resulta extraño). Pero, tras la detención, escribe el reportero, sus informadores “sí tienen la certeza de que tan pronto surgió la noticia, en el gobierno federal tuvieron la película completa de lo que había sucedido. Y esa película llegó casi de inmediato al escritorio del presidente”.
Por lo anterior, la hipótesis es que el tabasqueño y su gobierno, al manifestar repetidamente su ignorancia sobre lo sucedido, buscan presionar para que el gobierno de Estados Unidos se pronuncie sobre el caso.
La razón de que autoridades tuvieran la información de la detención de Zambada la atribuye Loret de Mola a las relaciones que con los grupos delictivos sostiene Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa, quien, a cambio de protección y hasta negocios con su administración, sólo pide a las bandas delictivas no aumentar los índices de violencia y delincuencia.
Tras esa denuncia del contubernio entre autoridades de Sinaloa y líderes del narcotráfico, Loret de Mola también se refirió a la permisiva política que respecto a ellos ha mantenido López Obrador, por la que la captura de algunos de ellos han sido por la presión estadounidense “y de manera pactada”, lo que explica la detención de Ovidio Guzmán en 2023.
En otro fuerte señalamiento, Loret de Mola afirmó que “se sabe que ya se reunieron, con la venia de Palacio Nacional, un representante del Mayo, uno de los Chapitos y uno del cártel del Golfo. El objetivo: que toda esta sacudida no derive en un baño de sangre”.
El 26 de julio, en su conferencia de prensa, López Obrador declaró lo siguiente sobre la detención del Mayo: “Todo esto se está investigando para ver en cámaras qué se tiene y, además, el gobierno de Estados Unidos tiene que dar un informe, pero completo. No es nada más así de declaraciones generales: hay que informar, tiene que haber transparencia”.
Y remató: “Estoy seguro que van a informarnos completo y ya vamos a poder conocer bien las cosas”.
Trece días después el gobierno mexicano no sólo sigue esperando, sino que hasta ha desinformado (como cuando Rosa Icela Rodríguez, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y próxima secretaria de Gobernación, dio el nombre de un piloto que nada tenía que ver y que el avión con el Mayo había salido de Sonora). Este jueves Loret de Mola indica que López Obrador y muchos de sus funcionarios saben bastante más por vía de la delincuencia organizada.
