El martes de esta semana Fox Sports hizo pública la adquisición de los derechos para transmitir los partidos de dos equipos que participan en la Liga MX de futbol: Santos, de Torreón, y Xolos, de Tijuana, operación que convertirá a esa televisora de paga en una nueva potencia futbolera en las pantallas mexicanas.
FS FMX
Santos y Xolos tienen contrato vigente con Tv Azteca, pero Fox Sports logró que ésta le vendiera los derechos de transmisión para los juegos como locales de ambos equipos; el acuerdo indica que Fox se hará cargo de esas transmisiones una vez que el compromiso de aquellos con Azteca concluya: en el caso de los Xolos será a partir de julio de 2018, y en el del Santos, un año después. La operación forma parte del proyecto FS FMX (Fox Sports Futbol Mexicano) presentado en julio de este año y cuyo objetivo es la expansión de esa televisora en el futbol nacional. Con la adquisición de estos derechos televisivos, Fox Sports controlará las transmisiones de cuatro equipos de primera división: en septiembre de 2012 hizo suyos los correspondientes al León, entonces recién ascendido a la Primera División, y en mayo de 2014 los del Pachuca.
Adicionalmente transmitirá los juegos de seis equipos mexicanos de futbol femenil —pertenecientes a la liga profesional recientemente creada— cuyos derechos también adquirió: además de los cuatro mencionados transmitirá al Guadalajara y al Monterrey.
Empate con Azteca
El control de los derechos de transmisión de cuatro equipos de la Liga MX por parte de Fox Sports no es un dato menor: en 2019 quedará a la par de Tv Azteca, que verá disminuida su presencia como propietaria de derechos en el futbol mexicano: si no adquiere los de alguna otra escuadra, la televisora de Salinas Pliego solo tendrá a cuatro equipos bajo su control.
De no registrarse nuevas operaciones de compra y venta de derechos de transmisión en el futbol mexicano, la distribución entre las televisoras quedaría así: TV Azteca tendría cuatro equipos: Atlas, Morelia (que son propiedad del Grupo Salinas), Veracruz y Puebla; Fox Sports, cuatro: León, Pachuca, Santos y Xolos; Televisa continuaría como líder con siete equipos: América (del que es dueña), Monterrey, Tigres, Toluca, Necaxa, Cruz Azul, Pumas y Guadalajara (aunque en el caso de las “Chivas” solo posee los derechos para transmitir en tv de paga a través de su filial TDN); con solamente un equipo estarían Imagen Televisión, que transmite los juegos del Querétaro (del cual es dueña) y TVC, que tiene los derechos de Lobos BUAP.
Nuevo escenario
¿Tv Azteca se “debilita” al vender a Fox Sports los derechos de transmisión de Santos y Xolos? No necesariamente. En la actualidad poseer los derechos de transmisión de un equipo de futbol en México tiene implicaciones diferentes a las de hace varios años, cuando la exclusividad se usaba para “sacar de la jugada” a los competidores. Recordemos, por ejemplo, que si alguno o algunos de los equipos cuyos derechos posee Televisa llega a la final del torneo Liga MX esta empresa, en su calidad de preponderante, tiene la obligación de vender los derechos de transmisión de los partidos de la final a la televisora que se los solicite, ello por disposición del Instituto Federal de Telecomunicaciones, emitida en junio de 2014.
Esto impide que Televisa transmita esos partidos de manera exclusiva y coloque por las nubes los precios por emisión de spots, pero en compensación le permite vender los derechos de transmisión de la final a otras televisoras.
Comprar y vender
La tendencia actual en las transmisiones de tv del futbol mexicano es precisamente esa: comprar a los equipos derechos televisivos no para reservarse la transmisión en exclusiva, sino para vender a otras televisoras la posibilidad de difundir determinados partidos o toda una temporada. Por ejemplo, Fox Sports posee los derechos de León y Pachuca, pero vendió a Imagen Televisión la autorización para transmitir en tv abierta los partidos de ambos equipos.
Quizá a Tv Azteca le convenga más vender los derechos de Santos y Xolos a Fox y después negociar con esa televisora la autorización para seguir transmitiendo sus partidos. Así no tendría que pagarles las elevadas cantidades que implica la compra de una exclusividad y podría mantener su oferta futbolera.
Este artículo fue publicado en Milenio el 26 de octubre de 2017, agradecemos a Fernando Mejía Barquera su autorización para publicarlo en nuestra página.