Luego de que la madre buscadora Ceci Flores denunciara en un video que en la frontera entre Tláhuac e Iztapalapa su grupo de activistas localizó un crematorio clandestino con restos humanos, el gobierno federal lanzó la ofensiva para desprestigiarla, pues el presidente López Obrador aseguró que debido a su ambición desmedida ya se desquició.
“Antier salió de que habían encontrado un crematorio, pero vinieron de Sonora y de Chihuahua, y pues son personas que no nos quieren a nosotros, y que pertenecen al bloque conservador”, dijo.
Agregó que “yo pienso que es por la desesperación, por la ambición desmedida al poder y al dinero, porque el dinero y el poder son tentaciones, grandes tentaciones que pueden llevar a las personas a desquiciarse”.
Aseguró que esas personas trafican con el dolor y administran la desgracia humana porque quieren engañar y hacer dinero.
Dijo que la causa de los desaparecidos “es muy justa”, pero “no se debe administrar la desgracia, no se debe de traficar con el dolor humano, y porque eso además no les ayuda, no les ayuda. Antes como tenían el control de los medios y de todo, podían engañar, pero ahora no, ya la gente está muy, muy despierta, muy consciente, y la verdad se abre paso. Antes podían tapar el sol con un dedo, ya no se puede, pero ellos siguen actuando así”.
En suma, AMLO aseguró que la madre buscadora Ceci Flores actúa por ambición desmedida, que está desquiciada, que lucra y trafica con el dolor y la desgracia humana y que su denuncia sobre el crematorio clandestino tiene la finalidad de afectarlo a él, porque no lo quiere.
Lo cierto es que en muchas ocasiones Ceci Flores ha pedido a AMLO que la reciba para hablar sobre la tragedia de los miles de desaparecidos, pero en todas las ocasiones el presidente se ha negado, alegando la necesidad de “cuidar la investidura” y otras excusas igualmente inadmisibles.
Ayer fue Claudia Sheinbaum quien criticó a Ceci Flores, pues aseguró que habla “sin pruebas” y descalificó que como tales la activista haya esgrimido el hallazgo de ropa y credenciales de elector.
Por su parte, el jefe de gobierno de la CDMX, Martí Batres, se presentó en la mañanera para desmentir a Flores y aseguró que los restos óseos encontrados son de “perritos”, pero a pesar de decir que todo está en orden, se negó a que organismos internacionales acudan a investigar.
Quien puso la cereza del pastel, como siempre, fue el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien aseguró que la activista –que ha manifestado su apoyo a Xóchitl Gálvez– trafica con el dolor humano y está desquiciada. Pero como siempre, no aportó ninguna prueba.
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