El bloque legislativo conformado por Morena, PRD, PT y PVEM aprobó, con 316 votos a favor; 129 en contra y 23 abstenciones, la despenalización del uso lúdico de la mariguana en todo el país para mayores de 18 años al expedir la Ley Federal para la Regulación del Cannabis.
Al ponerse en vigor la reforma, serían liberadas de manera inmediata todas las personas actualmente presas por consumo o posesión de mariguana para uso personal.
Luego de su aprobación en Comisiones, este 9 de marzo, hoy miércoles el pleno de la Cámara aprobó en lo general el conjunto de reformas a la Constitución que permiten a los mayores de edad el consumo y posesión de mariguana o cannabis psicotrópica para consumo personal y lúdico. Además de la expedición de la ley, se reforma el Código Penal Federal, que hasta hoy penaba la posesión y consumo de la mariguana. También se hicieron adecuaciones a la Ley General de Salud.
La nueva ley autoriza la venta de más de 28 gramos por día a un mismo consumidor y/o el autocultivo de entre 6 y ocho plantas en una vivienda particular. Seis si es para un solo consumidor y ocho si es más de uno. Para ello hay que obtener una licencia especial y renovarla cada año.
Los legisladores establecieron 215 reservas o propuesta de ajustes, las cuales serán votadas a lo largo de la tarde y noche por lo que el debate aún no concluye, pero el dictamen ya fue aprobado en lo general.
Votaron en contra el PRI y PAN, lo que resultó en la realización, en redes sociales, de un golpeteo intenso por parte de Morena hacia lo que llaman “el PRIAN” y su política de combate a las drogas. En sexenios anteriores, dichos partidos, tanto desde la oposición como en el poder, se opusieron siempre a la legalización de la mariguana, lo que de acuerdo a analistas en materia de seguridad ha ocasionado el recrudecimiento de la violencia, pues favorece la clandestinidad de la compra y venta.
El dictamen, presentado desde 2020 por la bancada morenista en el Senado, fue objeto de diversas modificaciones por parte de la Cámara baja. Uno de los cambios centrales fue la eliminación de la propuesta de crear un Instituto Mexicano para la Regulación del Cannabis y el añadido del requisito de la licencia para cultivo de plantas caseras.
Ello, para impedir la producción masiva, ya que sólo se permite la producción para autoconsumo. Sin embargo, también contempla permisos para “clubes” de consumidores.
En cambio, se da a la Comisión Nacional contra las Adicciones diversas atribuciones en torno a la nueva situación. Esta instancia tendrá la facultad de prohibir el consumo a personas específicas de entre los 18 y los 25 años.
Se prohíbe el consumo entre menores de edad o consumir en presencia de menores. También está prohibido consumir en oficinas y lugares de trabajo y en lugares catalogados como “libres de humo”.
Al existir desde hace varios años un movimiento que busca que se apruebe también el uso medicinal y científico de la cannabis, la ley aborda el manejo industrial de la planta, la cual tiene diversas aplicaciones, como medicamentos contra la epilepsia, a partir de un aceite no psicoactivo y la fabricación de telas y papel, a partir de la fibra del tallo de la planta, llamado cáñamo.
