La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ha despedido de manera irregular en los meses recientes a unos 200 trabajadores pese a la contingencia provocada por la Covid-19, según declaran varios de ellos.
Según información de Milenio, las personas han sido despedidas sin haber recibido las indemnizaciones establecidas en la ley e incluso sin existir causa de despido.
José Matus, quien participaba en el Programa de Sexualidad, Salud y VIH de la Comisión, declaró a ese diario que “nos dijeron que estábamos cesados; así, sin ninguna indemnización, ninguna compensación, nada. Todos los derechos laborales, las prestaciones fueron violentadas por la propia Comisión de Derechos Humanos”.
Del Programa, en el que había ocho trabajadores, ya sólo quedan cuatro por los despidos. Latinus presentó el caso de ellos, quienes relataron que, sin mayores explicaciones, fueron reunidos por el director del Programa, quien sencillamente les dijo: “Esta no es una plática, es una información: saquen sus cosas”.
Uno de esos trabajadores padece VIH, por lo que sus compañeros consideraron paradójico y contradictorio que en el Programa despidan, justamente, a una persona con ese mal.
Otro empleado dijo que para su despido no fue considerado su desempeño, sino que su jefe le dejó muy claro que lo que querían era su plaza con una amenaza velada: “Si no la quieres dejar hay un área que se llama ‘Cese’, que no le gustaría llegar a ese extremo porque es muy feo y drástico, una entidad jurídica no tan grata”.
Recordaron que la presidenta de la CNDH, Rosario Piedra, emitió una circular en la que indicaba que a quienes no quisieran continuar en el organismo les darían la indemnización correspondiente y que nadie sería despedido.
Sin embargo muchos trabajadores más han sido cesados sin mediar ninguna explicación ni justificación.
Según otros testimonios de una empleada de la Quinta Visitaduría, además de los despidos también ha habido empleados que han sido obligados a renunciar.
Además del caso de Lázaro Serranía, quien fue subdirector de área de la Dirección General de Comunicación de la CNDH y despedido el lunes pasado tras 20 años de laborar en el organismo, también Gonzalo Cortés, visitador adjunto del Programa de Agravio a Periodistas y Defensores Civiles de Derechos Humanos, fue separado de su cargo sin haber recibido la indemnización correspondiente.
Además, varios de los trabajadores despedidos han comentado que, pese a que lo han intentado, no han sido recibidos ni escuchados por los directivos del organismo. Por ello es que ahora los trabajadores despedidos sin motivo justificado ni indemnización deberán recurrir a las autoridades laborales para hacer valer sus derechos ante el organismo encargado de defender los derechos humanos.
