La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) considera al gobierno de Andrés Manuel López Obrador como un fenómeno “populista y demagógico”, mientras que el neoliberalismo se legitima cada vez más, se cometen crímenes de lesa humanidad y se aplican programas sociales clientelares.
En el documento base para su segundo Congreso Nacional Político-Educativo, que inició este viernes en la Sección IX de la Ciudad de México, se recordó que en 2018 caracterizaron al gobierno de López Obrador como de “continuidad neoliberal, administrador de la política rentista, asistencialista y autoritario”.
Sobre el presidente, dice que tiene un “discurso populista, sesgado y tendencioso”, y señaló que es un fenómeno social y político “demagógico” en el contexto de un “pueblo necesitado de esperanzas”, por lo que López Obrador “resulta vital, sin importar que, de manera inversa, el neoliberalismo se legitima cada vez más en nuestro país. Es un instrumento perfecto para mantener el sistema capitalista, dado que AMLO nunca se declaró anticapitalista”.
La CNTE hace diversos señalamientos lapidarios de la administración de López Obrador. Sobre la seguridad el documento acusa: “Desapariciones, asesinatos, secuestros y asaltos parecen ser el común denominador; esto ha ocasionado que miles de familias se vean desplazadas. Sólo en 2021 se registraron 33 mil 308 asesinatos. En lo que va del año, el continuo homicidio de periodistas, activistas y civiles preocupa de manera alarmante”. Acerca de la administración de justicia, denuncia que se han cometido crímenes de lesa humanidad mientras “los responsables de aplicar justicia castigan a inocentes y cierran casos judiciales que favorecen a políticos corruptos, empresarios y personajes públicos que compran a los jueces y magistrados”.
Acerca de obras emblemáticas del gobierno de López Obrador como el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas y el Corredor Transísmico (sic), la CNTE advierte: “Son el resultado de acuerdos con las multinacionales y empresarios mexicanos para explotar los bienes nacionales. Estos proyectos afectan a cientos de poblados, dañan sus ríos, manantiales, fauna y flora”.
Los programas sociales del gobierno de López Obrador son juzgados de manea contundente: la CNTE los califica como “clientelares”, por lo que “no benefician ni incentivan a los campesinos ni pequeños productores; los recursos económicos destinados a los programas siguen administrados y acaparados por caciques, familiares de políticos, amigos y conocidos de funcionarios. Ejemplo de esto, el caso de la investigación periodística sobre la producción de cacao y chocolate en el Sur de México”.
La CNTE también mencionó la estrategia de descalificaciones que práctica López Obrador: “Todos aquellos que no coincidan con su gobierno son acusados de opositores a la autodenominada 4T”.
En conferencia de prensa por su congreso, dirigentes de la CNTE denunciaron que, frente a sus demandas, el gobierno federal ha mostrados “oídos sordos”, por lo que han tenido que recurrir a diversas protestas. También acusaron que, pese a que se dijo que este gobierno dijo que no lo sería, sí es represor, de lo que hay evidencias en varios estados.
