Gil estaba nervioso. El nuevo capítulo de Luis Miguel, la serie, estaba por empezar. Pero mientras, una nota de Pedro Domínguez publicada en su periódico MILENIO informaba que “el presidente Andrés Manuel López Obrador acusó que los organismos autónomos ‘no hacen nada de nada’ y solo se dedican a ganar mucho dinero y a defender a grupos de intereses creados, incluso promoviendo amparos contra las reformas promovidas por el gobierno federal (…) Vamos a llevar a cabo una reforma administrativa para ajustar al gobierno a las nuevas circunstancias, que no tengamos toda esta dispersión, todos estos organismos autónomos, la mayoría no hace nada en beneficio del pueblo, no hacen nada de nada, solo cuando se trata de defender intereses creados y ganan muchísimo fueron los que se ampararon para poder ganar más que el presidente”.
Gil no da pie con bola. Los organismos autónomos no sirven para maldita la cosa y fueron creados para simular que el gobierno atendía a la población, pero estas dependencias servían para “facilitar el saqueo de los influyentes”. A Gil le va a dar algo. ¿De verdad? ¿Este es el Presidente que queremos? ¿En serio y de verdad?
Oigan esto: “Lo paradójico es que instituciones financiadas con presupuesto público como la transparencia, la de la competencia o cualquier otra también se amparen en contra de las iniciativas de ley que presentamos para defender al pueblo. En la reforma eléctrica, la de hidrocarburos, la reforma telefónica, las instituciones estas autónomas al servicio de las empresas, de las corporaciones. ¿Qué las empresas no tienen recursos para contratar abogados que los defiendan?”.
Gil no sabe rezar, pero se sabe encabronar. No puede ser que el Presidente tenga esta opinión de las instituciones que logró crear la sociedad a lo largo del tiempo. López Obrador dijo que ha prevalecido esta situación porque el gobierno tenía como propósito principal defender a particulares, empresas y corporaciones. Gil caminó sobre la duela de cedro blanco y en el muro norte del amplísimo estudio, se dio un tope de los fuertes: ¡soc, soc, soc!
Sueños guajiros
Ahora mal sin bien, otra nota de Silvia Arellano en su periódico MILENIO informa que “el coordinador de la bancada de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, aseguró que ‘están equivocados’ quienes creen que la Cuarta Transformación quiere apoderarse de los órganos electorales, reiterando que son ‘sueños guajiros’ y que se trata de ‘una apreciación falsa, alejada de toda realidad, que responde al discurso anti-AMLO y anti-Morena’”.
Oiga, Monreal, el Presidente se va a enojar, y cuando se enoja no hay tu tía. Vean cómo todos nos estamos volviendo locos: “Estoy hablando de la realidad, estoy hablando de hechos reales, por eso quienes alegan, argumentan que el Presidente y la 4T, quieren apoderarse de los órganos autónomos o del Poder Judicial, son sueños guajiros de los que critican y cuestionan. Es prácticamente imposible, aun cuando ganara la mayoría Morena, el diseño constitucional en México tiene que tener un gran consenso para que proceda”.
Pues pídale una cita al Presidente y explíquele: “en este momento no tenemos mayoría calificada; tendríamos que acudir a un gran consenso con la oposición, pero, en este caso, está atrincherada en que no van a apoyar la desaparición de órganos autónomos”, dijo Monreal y consideró que “es prácticamente imposible, aun cuando ganara la mayoría Morena, el diseño constitucional en México debe tener un gran consenso para que procedan cambios de fondo como éste”.
El tribuno Muñoz
Y en otra nota, ésta de Expansión, se informa que “Porfirio Muñoz Ledo, diputado federal de Morena y ex presidente de la Cámara baja, anunció este jueves que formará un Frente Amplio en Defensa de la Constitución, con la intención —dijo— de resguardar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y a los organismos autónomos que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha propuesto desaparecer”.
Muñoz Ledo afirmó que es momento de frenar “el país de un solo hombre”, en referencia a las intenciones de López Obrador: “Se trata de que defendamos la Constitución, reflexionando y haciendo propuestas. De defender la autonomía de las instituciones como el INE, Inegi, INAI y todos los órganos autónomos constitucionales, producto de un avance democrático en el país que impulsamos muchos sectores”.
Quién lo diría: el Tribuno Muñoz en defensa en serie y en serio de la democracia. Gil se pone de pie, monsieur Porfirio.
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