El departamento de Estado de Estados Unidos, a cargo de Anthony Blinken, reconoció el “claro” triunfo del opositor Edmundo González en las elecciones de Venezuela frente a Nicolás Maduro, declaración que el dictador acusó de ser un intento de “golpe de Estado” y el presidente Andrés Manuel López Obrador calificó de “exceso” e “imprudencia”.
En comunicado oficial, el gobierno norteamericano dijo que para ellos hay “abrumadora evidencia” de que la oposición derrotó a Nicolás Maduro en las elecciones del pasado domingo.
“Dada la abrumadora evidencia, está claro para los Estados Unidos y, lo que es más importante, para el pueblo venezolano que Edmundo González Urrutia ganó la mayoría de los votos en las elecciones presidenciales de Venezuela del 28 de julio”, escribió Anthony Blinken en sus redes sociales.
“Felicitamos a Edmundo González Urrutia por su exitosa campaña. Ahora es el momento de que los partidos venezolanos inicien conversaciones sobre una transición respetuosa y pacífica de conformidad con la ley electoral venezolana y los deseos del pueblo venezolano”, agrega.
Ello, mientras el organismo electoral venezolano, bajo control del gobierno, aún no da resultados oficiales y pretexta haber sufrido un hackeo en sus sistemas que le impiden acceder a todas las actas. Al tiempo, la oposición ha documentado en un sitio web alrededor de 80% actas de las casillas del país que demuestran que González venció a Maduro en una proporción de 70 a 30.
El proceso electoral gestionado por el Consejo Nacional Electoral y el conteo de votos “fueron profundamente defectuosos, lo que produjo un resultado anunciado que no representa la voluntad del pueblo venezolano”, dijo el gobierno de EE. UU.
El comunicado norteamericano se emite a un día de que el secretario general de la OEA, Luis Almagro, pidiera llevar a Nicolás Maduro ante la Corte Penal Internacional por el “baño de sangre” que ha desatado en Venezuela y otros abusos contra los derechos humanos.
La oposición, encabezada por la lideresa María Corina, ha llenado las calles de Caracas en varias manifestaciones. En redes sociales se difundieron los videos de las masivas concentraciones de protesta, también del derribo de una estatua de Hugo Chávez en una población pequeña y el momento en que muchos venezolanos lloran cuando Maduro anunció su supuesto triunfo.
El heredero de Hugo Chávez amenazó hace dos días con emprender una “nueva revolución” de la “mano del pueblo”, lo que es una amenaza directa a sus opositores, a quienes quiere fincar cargos por delitos diversos para encarcelarlos. Muchos manifestantes han sido detenidos y la lideresa María Corina y el candidato opositor Edmundo Gonzáles se encuentran “bajo resguardo”, según han dado a conocer.
Al respecto, Estados Unidos dijo que “las amenazas de Maduro y sus representantes de arrestar a los líderes de la oposición, incluidos Edmundo González y María Corina Machado, son un intento antidemocrático de reprimir la participación política y retener el poder”.
Mientras, el presidente mexicano ha defendido hasta donde ha podido a su homólogo venezolano, aunque al momento no ha validado el resultado de las elecciones. Lo más que se ha atrevido a decir es que se tiene que esperar a los resultados oficiales y también ha condenado el “injerencismo” de los países que denuncian el fraude electoral y la falta de autoridad moral de la OEA. Esto, en el contexto de la crisis que vive el gobierno de la 4T tras la detención del capo Ismael Zambada.
Sobre el comunicado emitido por la oficina de Blinken, AMLO dijo que “con todo respeto” se trata de un exceso y una imprudencia. “Con todo respeto lo que hicieron ayer desde el Departamento de Estado es un exceso”, dijo este viernes, en su conferencia matutina.
Aseguró que a ningún país le corresponde opinar sobre ese proceso electoral y que ese pronunciamiento no tiene que ver con la política que se inventó para evitar la confrontación y la guerra”.
Según AMLO, Estados Unidos actúa de manera indebida, pues nada le autoriza a pronunciarse al respecto. “¿Dónde está la ley?, ¿qué dice el derecho internacional en esta materia?, ¿cuál es su fundamento? ¿Quién le autoriza a pronunciarse a favor de un candidato si todavía no aparecen las actas?”, dijo, sin mencionar que la oposición ha expuesto el 80% de las actas, pues la oposición, sabedora que Maduro no permitiría una derrota, documentó con el máximo detalle el proceso electoral.
Como si fuese un líder internacional, AMLO hizo un llamado “respetuoso a todos los gobiernos para que no haya intervencionismo. Ningún gobierno está autorizado, no es legal, legítimo, el emitir un fallo dando perdedor o ganador a un candidato de otro país, ¿qué es eso? Si no hay un gobierno del mundo, eso no se lleva con la democracia ni con el respeto a la independencia, la libertad y la soberanía de los pueblos”.
Hay que recordar que el propio AMLO se ha inmiscuido en los procesos electorales de Ecuador y Bolivia, defendiendo a los candidatos de su preferencia. En esos casos, para él no había intervencionismo, sino justicia. Ahora que se ataca a un régimen con el que simpatiza, finge escandalizarse.
Por su parte, el gobierno de Nicolás Maduro, por medio del canciller Yvan Gil, aseguró que la postura de Estados Unidos es una “perversa maniobra” para provocar violencia en las calles y que el gobierno de Joe Biden se ha puesto al frente de un “golpe de Estado” contra Maduro.
El funcionario venezolano añadió que Venezuela tiene una de las democracias “más robustas del mundo”.
“El pueblo venezolano habló, ejerció su derecho y reiteró su camino irrenunciable de la soberanía, la paz y la construcción del socialismo para garantizar la mayor suma de felicidad”.
En otros momentos, el gobierno de Maduro ha asegurado que las masivas protestas no son más que parte de una conjura fascista e imperialista y hasta el dueño de X, Elon Musk, quedó envuelto en la polémica por sus posturas en contra de la dictadura, al grado que en una conferencia de prensa Maduro aseguró que “Elon Mocs” era su “archienemigo”.
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