El Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) cumplirá sus compromisos y obligaciones del proyecto de Nuevo Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (NAIM) en Texcoco. La concesión continúa vigente en los términos en que fue otorgada y sin afectación en la ejecución de las obras actuales de construcción.
Por lo anterior, cumplirá cabalmente todos sus compromisos en la ejecución del proyecto del NAIM en Texcoco hasta el próximo 30 de noviembre, informó en conferencia de prensa Federico Patiño, director general del GACM, que es el concesionario de la obra del NAIM.
Explicó que los contratos del proyecto del NAIM están vigentes, jurídicamente no hay cambio. Por ello se tienen derechos y obligaciones que se tienen que cumplir cabalmente, ya que el incumplimiento amerita sanciones.
También comentó que “la estructura del plan financiero para la construcción del NAIM fue instrumentada de manera sólida y siguiendo las mejores prácticas internacionales para este tipo de proyectos, basando la fuente de pago principalmente en las Tarifa de Uso de Aeropuerto (TUA) que pagan los pasajeros del aeropuerto internacional Benito Juárez”.
Asimismo, aclaró: “No hemos recibido ninguna documentación oficial para llevar a cabo una actividad distinta a la que nos hemos comprometido de acuerdo con los contratos celebrados”.
Sobre el avance de la obra hasta hoy, reportó que, tras cuatro años de construcción del NAIM, hay un 32% de avance global de la obra con un desembolso de cerca de 60 mil millones de pesos, “recursos ya invertidos y pagados a los contratistas”.
Además, “tenemos comprometidos 170 mil millones de pesos, que representa el 60% del valor total de la obra a través de procesos licitatorios, de los cuales el 88% fue a través de licitaciones internacionales”.
Cuando se le preguntó qué ocurrirá con la obra ya construida, dijo que “no sabemos cuál va a ser el futuro, si le van a dar uso a esas instalaciones o hay que removerlas. Eso hay que preguntárselo a la próxima administración”.
Dijo que el proceso se ha manejado de acuerdo con estándares internacionales de transparencia, por lo cual se pudieron revisar los procesos licitatorios, que fueron transmitidos en vivo, y dieron a conocer sus “libros blancos”, que están disponibles en internet. Aclaró que todos los contratos están allí y que pudieron ser auditados desde el principio.
Al respecto, también comentó que el GACM ha tenido reuniones con el equipo de transición: “Se les ha dado la información. Han sido reuniones cordiales, abiertas”.
Añadió: “Si hay una revocación de la concesión a GACM lo que procede, de acuerdo con la Ley de Aeropuertos, es una indemnización equivalente al monto invertido no amortizado, que son aproximadamente estos 60 mil millones de pesos que comentaba. Son inversiones ya realizadas, y ese sería el monto de la indemnización al propio concesionario. Eso se iría para prepagar el 50% de los bonos si así fuera el caso. El otro 50% de los bonos sería una barrida del 100% de la TUA; es decir, el aceleramiento consiste en que ese 50% de los inversionistas tendrían derecho a captar y destinar el 100% de la TUA que genere el actual aeropuerto Benito Juárez, que se prevé que para este año sea de 500 millones de dólares. Eso se iría para el aceleramiento de la deuda, para el pago de los otros 3 mil millones de dólares de bonos”.
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