José Ramón López Beltrán vive en una casa propiedad de la asistente de la directora del diario La Jornada, empresa que ha sido beneficiada con más de 750 millones de pesos durante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador. Es la segunda ocasión en que reside en propiedades de personajes vinculados con empresas que tienen contratos con la administración federal.
Este miércoles Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) dio a conocer el reportaje “La otra ‘casa gris’: El hijo mayor de AMLO ocupa en Coyoacán casa ligada a contratista”, de Iván Alamillo y Valeria Durán, en el que se presentan documentos y hasta un intento de entrevista con López Beltrán acerca de la propiedad en la que actualmente reside en la Ciudad de México.
La ubicación del domicilio donde reside el hijo del mandatario se deriva también de los correos hackeados a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) por el grupo Guacamaya. En marzo pasado Latinus dio a conocer el trato privilegiado que durante la crisis de Covid-19 recibieron López Obrador y su vástago, quien no sólo recibió Remdesivir, un costoso y hasta entonces no autorizado medicamento para tratar esa enfermedad, sino que también el Ejército se hizo cargo hasta de hacerle el quehacer en su casa.
Los documentos de la Sedena revelaban el domicilio de López Beltrán en la Ciudad de México, que se encuentra en la colonia Copilco Universidad (en la que residió su padre hace ya varios años). Según una escritura que obtuvo MCCI, la casa es propiedad de Guillermina Aurea Álvarez Cadena, asistente de la dirección de La Jornada, cargo que es ocupado por Carmen Lira Saade, comadre del presidente y quien hasta cuidó de los hijos de López Obrador cuando eran niños (en su conferencia de prensa del 15 de febrero de 2022, cuando recordó que en 1995 era perseguido y que hasta había una orden de aprehensión en su contra, el tabasqueño agradeció a las periodistas Lourdes Galaz y Lira Saade que hubieran ido a buscar a sus hijos).
Como recuerda el reportaje, entre 2019 y 2022, ya durante el gobierno del compadre de su directora, La Jornada recibió, al menos, 750 millones de pesos en publicidad, más del doble que en todo el sexenio de Enrique Peña Nieto (quien prácticamente había salvado a esa empresa de la quiebra). De esa forma tan contundente, ese diario es el más beneficiado por el gobierno de López Obrador.
Por supuesto, la inversión del actual gobierno se puede ver en el trabajo periodístico de La Jornada, lo que incluso ha sido reconocido por López Obrador, quien en sus conferencias de prensa ha dicho en varias ocasiones que ese diario es el mejor de México y que es el único que “los trata bien”.
Es la segunda ocasión en que se encuentra que el primogénito del presidente vive en casas de personas vinculadas con contratistas del gobierno federal. La primera fue la de Houston, propiedad de quien entonces era un directivo de Baker Hughes, empresa que tiene contratos con Petróleos Mexicanos. Además, posteriormente se informó que incluso trabajaba en una compañía de los hijos de Daniel Chávez Morán, cabeza de Grupo Vidanta, uno de los empresarios más cercanos a López Obrador y de más beneficiados por su administración.
En el reportaje también se muestra y se reproduce en video el diálogo que los reporteros de MCCI pretendieron establecer con López Beltrán en las afueras de su casa en marzo pasado, quien, una y otra vez, con una actitud crecientemente amenazante, les invita a retirarse “a la buena” y hasta amaga con llamar a la policía porque “están en mi casa”, aunque se puede ver claramente que se encuentran en la vía pública. Ante ello, los reporteros optan por retirarse.
