Tal y como lo hiciera la semana pasada el presidente Andrés Manuel López Obrador, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, desacreditó el informe del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) en el cual se acredita que la pobreza en el país se incrementó en 3.8 millones de personas entre 2018 y 2020.
Según la mandataria, se trata de una medición “tramposa” porque se no se toma en cuenta que en el periodo de referencia se pasó de la “economía neoliberal” a la “economía moral”, donde los criterios para medir la pobreza son muy distintos. Señaló que mientras en la primera se afirmaba que se salía de la pobreza con unos cuantos pesos “focalizados”, ahora se privilegian los derechos.
“Se definían los criterios de pobreza, por ejemplo, con un salario de 3 mil 500 pesos y entonces se decía ‘vamos a darles 200 pesos focalizados y ya van a tener 3 mil 700 pesos’ y se decía que ya salían de la pobreza. Esa era la manera en que se daban los programas, como si 200 pesos hicieran a una persona menos pobre. Y ahora es un cambio completamente distinto, se pasó de la economía neoliberal a la economía moral, donde estamos hablando de derechos”, dijo.
Desde su punto de vista, el Coneval está comparando “peras con manzanas” al basar su comparativo en un año donde la pandemia obligó a una suspensión de actividades con las consecuentes pérdidas de empleo y del poder adquisitivo, con otro como 2018, donde no existieron dichos factores. A decir de la jefa de Gobierno son circunstancias que no deberían ser comparables entre sí.
“Comparar un año donde hubo pandemia con un año en donde hicieron la encuesta en uno de los momentos más difíciles de la pandemia, pues obviamente que no puede ser comparable (…) Están comparando peras con manzanas en cierta manera”, manifestó.
El viernes 6 de agosto, en su conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador desestimó el informe del Coneval sobre la pobreza y tras asegurar que su administración ha apoyado “como nunca” a los pobres, dijo tener otros datos y otros criterios para medir la pobreza que no entienden organismos acostumbrados a los enfoques neoliberales.
“No acepto el resultado de esa encuesta, tengo otros datos…Y creo que la gente está recibiendo más apoyo y, aún con la pandemia, la gente tiene para su consumo básico, y algo muy importante, no ha perdido la fe y estamos saliendo adelante”, dijo entonces.
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