Mario Delgado, dirigente nacional de Morena, busca impedir la movilización ciudadana en defensa de la democracia anunciada para el próximo 18 de febrero, según él porque es una marcha disfrazada de la derecha y no puede haber actividad política en el periodo intercampaña. Acusó a Lorenzo Córdova de ser “representante del PAN”.
Este martes se anunció que la llamada “Marcha por Nuestra Democracia”, que se realizará el 18 de febrero y que irá del Monumento a la Revolución al Zócalo capitalino, además de movilizaciones en otras ciudades del país, convocadas por diversas organizaciones de la sociedad civil integrantes de UNID@S, tendrá un solo orador: Lorenzo Córdova, expresidente del Instituto Nacional Electoral (INE) e investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.
En su conferencia de prensa de este martes, en la que ofreció un balance de la precampaña de Claudia Sheinbaum, aspirante presidencial de su partido, Delgado fue preguntado sobre la marcha antes referida, y se lanzó contra ella cuestionando su legalidad.
“Preguntarle sobre este tema de la marcha que habrá en febrero de Lorenzo Córdova, si el partido va a presentar alguna denuncia o sólo lo dejó así como en el aire, a ver quién la pueda presentar”, dijo Silvia Arellano, reportera de Milenio, prácticamente acusando más que preguntando.
La respuesta de Delgado al respecto fue muy escueta: dijo que revisarían el asunto con los abogados, pero que a Morena se le hace “un acto disfrazado de la derecha” (lo dice el dirigente que, por ejemplo, estuvo acarreando personas durante la jornada de revocación de mandato, como lo acreditaron varios videos). Antes había advertido que las precampañas concluyen el próximo jueves 18 de enero y se entra en un periodo en el que “no puede haber actividad política; está prohibido por la ley hacer eventos públicos”, dijo el dirigente morenista, quien ha sido sancionado por el INE por violaciones a la normatividad electoral.
Preguntado sobre el proyecto del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para multar a Morena por los espectaculares de sus precandidatos (una propaganda nada disfrazada a favor de militantes de su partido), dijo que se habían deslindado de esos anuncios “y no pueden tratar de cargarle a un partido un gasto que no son responsables los participantes en el proceso de encuesta”. Es decir, quién sabe de dónde salieron las millonadas para esa publicidad, y Delgado tampoco demandó que se investigara quiénes la pagaron.
Delgado, quien se apresuró a invitar a Arturo Zaldívar a participar en la “4T” en cuanto anunció su renuncia a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, atacó a Lorenzo Córdova y le acusó prácticamente de ser panista. Al afirmar que la marcha del 18 de febrero es “un acto disfrazado de la derecha”, dijo que eso “lo delata el propio orador, pues es de los favoritos del PAN”.
