La ONU, la Unesco y la Misión de la Unión Europea en México condenaron el asesinato del periodista Julio Valdivia, además de que exigieron justicia y que se garanticen condiciones para la labor periodística. Article 19 consideró que la violencia contra periodistas ha aumentado sin respuesta adecuada de las autoridades.
Además de la Oficina en México de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, el secretario general de la ONU y la Unesco condenaron el asesinato del periodista Julio Valdivia, ocurrido el pasado miércoles en Tezonapa, Veracruz, y exigieron una investigación a fondo.
La directora de la Unesco, Audrey Azulay, expresó que se debe hacer cumplir la justicia para evitar que un brutal derramamiento de sangre restrinja las libertades de expresión, de prensa y de acceso a la información, que todos deben disfrutar.
También los Jefes de Misión de las Embajadas de los Estados Miembros de la Unión Europea en México, además de los embajadores de Noruega y Suiza condenaron el asesinato y pidieron que no quede impune.
Los diplomáticos expresaron su solidaridad con la familia y los amigos de Valdivia, a la vez que dijeron que el crimen “demuestra una vez más el preocupante grado de violencia e intimidación al que se enfrentan muchos periodistas en México”.
Llamaron a las autoridades a hacer todos los esfuerzos posibles para identificar y juzgar a los responsables del homicidio “para que no haya ‘zonas de silencio’ donde ningún periodista se atreva a trabajar”.
También señalaron la impunidad en este tipo de crímenes: “Expresamos nuestra preocupación por la falta de resultados en las investigaciones abiertas para esclarecer casos anteriores de asesinatos de periodistas en México”.
Por otra parte, en su cuenta de Twitter Ken Cuccinelli, secretario adjunto interino del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos comentó la nota del Washington Examiner sobre el asesinato de Valdivia, lo que, expresó “parece terrorismo”.
Al comentar la nota “Mexican journalist who reported on cartels found beheaded” del Washington Examiner, Cuccinelli escribió: “Esto parece terrorismo, presumiblemente fue una ‘advertencia’ para otros periodistas”.
Por su parte Article 19 recordó a las autoridades federales y de Veracruz que no basta con la condena pública del crimen, sino que sus obligaciones para proteger a los periodistas deben “materializarse en una actuación diligente y eficaz para evitar los asesinatos y otros crímenes contra la prensa en razón de su labor. Hasta el día de hoy, tanto a nivel nacional como estatal, la violencia contra periodistas ha aumentado de manera exponencial sin una respuesta adecuada de las autoridades”.
También exigió a la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales y en la Atención de Denuncias contra Periodistas y/o Comunicadores de la Fiscalía General del Estado de Veracruz que tome como principal línea de investigación el trabajo periodístico de Valdivia, trabajo en el que llama a coadyuvar a la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión.
Sobre ello, Article 19 recordó que Valdivia informaba acerca de la violencia en la región de Tezonapa, Veracruz, y que un día antes del crimen había publicado una nota sobre una balacera en Cosolapa, Oaxaca. Asimismo, recogió testimonio que indican que la delincuencia controla la distribución de los periódicos, lo que conduce a la censura.
Asimismo, mencionó que de los 135 periodistas asesinados en el país desde 2000, 30 (22 por ciento) han sido en Veracruz.
Para proteger a la familia de Valvidia convocó al Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, a la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas y a la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas de Veracruz.
