El precandidato presidencial de Morena, Andrés Manuel López Obrador, por segunda vez en menos de 48 horas, reaccionó de nuevo a la que sigue llamando ‘indirecta’ del presidente Peña Nieto, a quien ahora le recetó que tome pastillas de amlodipino, conocido medicamento que comercializa Pfizer contra la hipertensión y la angina.
“Ahora que al presidente le ha dado por las indirectas, le he mandado a decir de manera respetuosa que se serene, que no se altere, que no se caliente, que no le haga caso a las encuestas y que si se le sube la presión está medicina es buena, además ayuda a curar el mal de ojo y otras molestias”, dijo.
El presidente Peña Nieto dijo el lunes que “para que la sociedad cuente con seguridad y justicia no puede haber perdón ni olvido para los delincuentes, no puede haber borrón y cuenta nueva; dejar hacer y dejar pasar a los criminales significaría fallarle a la sociedad y traicionar a México”.
El 3 de diciembre pasado, durante una gira por Guerrero, AMLO propuso la posibilidad de otorgar amnistía como una solución para terminar con la violencia en el país; al final de ese acto, a pregunta expresa de si su propuesta de amnistía incluía a los cárteles del narcotráfico, respondió: “Vamos a plantearlo; lo estoy analizando”.
Esta declaración fue ampliamente cuestionada por diversos actores de la sociedad y la política, por lo que el tabasqueño la fue matizando al paso de las semanas, hasta que el político designado por él como responsable de seguridad, Alfonso Durazo, llegó a decir que el perdón, de aprobarse, sería sólo para campesinos pobres.
Sin embargo, el precandidato de Morena no ha declarado, expresamente y sin ambigüedades, que su propuesta de amnistía no será usada en beneficio de jefes de los cárteles del narcotráfico.
“Si están preocupados, nerviosos y con hipertensión, AMLO a Los Pinos (Amlodipino)”, aseveró el político tabasqueño en un video difundido por sus redes sociales. López Obrador, quien se encuentra de gira por Veracruz, dijo que el cambio será bueno y a “todos conviene que haya una transformación, que se acabe con la corrupción, ya es tiempo que haya un gobierno honesto”.
El amlodipino controla la hipertensión y el dolor en el tórax (angina), pero no los cura. Viene envasado en forma de tabletas para suministrar por vía oral; por lo general se toma una vez al día. Algunos efectos secundarios del medicamento son: inflamación (hinchazón) de las manos, pies, tobillos o piernas; cefalea (dolor de cabeza); malestar o dolor estomacal; mareos o náuseas; somnolencia (sueño); cansancio excesivo y rubor.
El medicamento que promociona López Obrador es elaborado con el nombre Norvasc por Pfizer, empresa estadounidense fundada en 1849, que después de diversas fusiones con Pharmacia and Upjohn y Parke Davis, actualmente es uno de los laboratorios farmacéuticos dominantes en el mercado mundial.
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