Luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador realizó una nueva consulta a mano alzada este fin de semana, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) criticó esta acción al señalar que con consultas en lo oscurito y sin transparencia busca imponer a toda costa sus negocios económicos y políticos.
“El presidente de la República quiere imponer, a toda costa, sus negocios económicos y políticos; ello es así porque los dos megaproyectos para el sur-sureste de este país, tanto el corredor Transístmico como el Tren Maya, no se ha consultado para nada a las comunidades indígenas y rurales que viven en esos estados. Es una absoluta burla que el presidente López Obrador quiera apostar a que en alguno de sus mítines a mano alzada se quiera decir que se aprueban este tipo de megaproyectos”, cuestionó Ángel Ávila Romero, integrante de la Dirección General Extraordinaria del PRD.
De igual forma, en un comunicado, el partido rechazó que López Obrador pretenda implementar proyectos al vapor, como la construcción del Aeropuerto de Santa Lucía; también lamentó que el Ejecutivo presuma que la comunidad aprueba sus proyectos sin dar a conocer los resultados a favor o en contra, cuando de manera irónica dice que sólo son los conservadores quienes se oponen a sus proyectos.
De hecho, el PRD coincidió con asociaciones civiles y habitantes de San Mateo del Mar, Oaxaca, que aseguran que la consulta del presidente violentó el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo sobre pueblos indígenas y tribales, debido a que no fue “libre ni informada y su convocatoria fue de manera exprés, creando incertidumbre entre la comunidad ikoots, la cual se opone al proyecto por el posible despojo de sus tierras y el daño ambiental que generará en su región”.
Por lo anterior, el Sol Azteca hizo un llamado al Ejecutivo a que antes de iniciar cualquier asignación directa, que pareciera más que tiene que ver con intereses políticos y económicos, con intereses de lucro, “se preocupe el presidente por verdaderamente consultar en un ejercicio democrático a las comunidades y que no nos quiera vender consultas a mano alzada como al estilo de los dictadores latinoamericanos o consultas patito como la que hizo en el aeropuerto de la Ciudad de México para cancelarlo”.
El comunicado, donde también indicaron que el Gobierno federal debió transparentar la metodología de la consulta pública, así como las regiones específicas que comprendió y el tenor de las preguntas fue suscrito de igual forma por los integrantes de la dirección extraordinaria Adriana Díaz, Arturo Prida, Camerino Márquez, Estephany Santiago, Fernando Belaunzarán y Karen Quiroga.
De gira en Oaxaca este fin de semana, López Obrador recordó que ya se llevó una consulta en donde los ciudadanos aprobaron, entre otros programas, el proyecto de desarrollo del Istmo, sin embargo, para que no le queden dudas a quienes “no lo ven con buenos ojos”, el mandatario sometió de nueva cuenta dicho programa a una consulta a mano alzada con los asistentes al acto que encabezó en Juchitán.
