La Secretaría de Hacienda y Crédito Público ajustó la expectativa de crecimiento para el 2019 de 1.6% a 1.1%; siendo la segunda ocasión en que se ajusta dicha expectativa a la baja, ya que antes se había pasado de un 2% al dicho 1.6%.
En el más reciente Reporte de Finanzas Públicas se señala que “para el crecimiento del PIB se utiliza como estimación puntual un crecimiento anual de 1.1%, 0.9 puntos porcentuales menor al utilizado en el Paquete Económico 2019, que era de 2% promedio”.
Esto, a pesar de que, según el reporte del segundo trimestre, el déficit en las finanzas públicas es menor de lo esperado, el superávit es mayor, se ha logrado colocar deuda en diversos mercados y el mercado laboral se ha estabilizado.
Se consideró, señala, el mismomarco macroeconómico que se detalló en el informe del primer trimestre del 2019 con excepción del crecimiento del Producto Interno Bruto y la producción de petróleo, variables que han sufrido modificaciones.
“Se modificó la plataforma de producción de petróleo a 1,727 miles de barriles diarios, es decir, 120 mil barriles diarios menos que la plataforma aprobada por el Congreso de la Unión en el Paquete Económico 2019”.
En tanto, la expectativa del crecimiento del PIB pasó de 1.6% a 1.1% para todo el 2019, recortando así casi a la mitad la meta aprobada por el Congreso de la Unión en el Paquete Económico 2019.
La dependencia informó, en un comunicado emitido el martes 30 de julio que “durante el segundo trimestre de 2019 la economía mundial continuó mostrando signos de desaceleración, en un contexto de tensiones comerciales y conflictos geopolíticos. La economía mexicana no es ajena a este ciclo y muestra resultados económicos mixtos”.
Estos resultados “mixtos” están compuestos de una “mayor debilidad” en la actividad industrial y la inversión, “mientras que las exportaciones no petroleras continúan presentando una tendencia positiva y el mercado laboral un desempeño estable, con crecimientos en el salario real”.
Según la dependencia “al primer semestre de 2019, los principales balances de las finanzas pública presentaron mejores resultados que lo programado”, ya que se tuvo un superávit de 228 mil 88 millones de pesos, superior al superávit programado de 135 mil millones de pesos.
Destaca que el déficit fue menor al previsto para el periodo y que en los primeros 6 meses del año, los ingresos presupuestarios “fueron superiores al programa en 12 mil 111 millones de pesos”.
Pero también admite que “entre enero y junio de 2019 el gasto neto pagado fue inferior al programa en 174 mil 484 millones de pesos”, es decir, un subejercicio, mismo que fue negado por el presidente Andrés Manuel López Obrador al calificarlo de “ahorro”.
La dependencia señala que “se seguirá trabajando para que el ejercicio del gasto esté en línea con el programado al cierre del año”.
En función de lograr estabilidad y desarrollo “el Gobierno Federal estableció para 2019 como meta fiscal un superávit primario de 1.0% del PIB”.
