Tras las reformas que el pasado 15 de octubre aprobó el Congreso de Nuevo León para incorporar la objeción de conciencia a la Ley de Salud estatal, diversas organizaciones civiles y defensoras de los derechos humanos, advierten que estas modificaciones implican discriminación en perjuicio de las mujeres, indígenas, la comunidad LGBTTTI y otros grupos de población.
La iniciativa que dio lugar al controvertido dictamen fue formulada por la diputada del Partido del Trabajo (PT), María Guadalupe Rodríguez Martínez, quien explicó que la objeción de conciencia permitirá al personal médico de los sistemas de salud del estado, negarse a participar en determinados actos o prestar servicios derivados de una orden de autoridad o de una norma jurídica, si considera que contradicen sus principios “éticos o morales” o sus creencias religiosas.
El proyecto fue aprobado por 35 votos a favor, 5 en contra y una abstención, con lo cual la fracción IV del artículo 48 de la Ley Estatal de Salud quedó redactada de la siguiente manera:
“El personal médico y de enfermería que forme parte del Sistema Estatal de Salud, podrán ejercer la objeción de conciencia y excusarse de participar en la presentación de servicios que establece esta ley”.
De acuerdo con el reporte de Animal Político, luego de la aprobación del dictamen se han producido manifestaciones de preocupación por parte de organizaciones y activistas, las cuales califican la medida como un acto de discriminación y advierten que se podrían vulnerar los derechos humanos de las personas, por ejemplo, mujeres que busquen practicarse un aborto o grupos de la diversidad sexual.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) señaló que si bien este organismo no se opone en forma alguna a una regulación del ejercicio de la objeción de conciencia; consideró que ésta debe hacerse con estricto apego a lo que establece la Constitución y garantizar el pleno respecto a las garantías individuales.
En redes sociales se han generado diferentes reacciones de organizaciones civiles, legisladores y otros personajes públicos, quienes coinciden en que lo aprobado por el Congreso de Nuevo León incurre en prácticas discriminatorias y viola la Constitución.
La organización Fuera del Clóset, defensora de la comunidad LGBTTTI, advirtió que con esta reforma, se abre la puerta a que se les niegue atención médica a este sector:
Aprueba Congreso de Nuevo León con 36 votos a favor y cinco en contra, reforma a Ley Estatal de Salud, mediante la cual, el personal de salud podrá negarse a prestar un servicio a una persona #LGBT, bajo el argumento de objeción de conciencia. pic.twitter.com/163JBQWlKA
— Fuera del Clóset A.C. 🏳️🌈🏳️⚧️ (@FueraCloset_AC) October 21, 2019
El ministro en retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, José Ramón Cossío, expresó que esta reforma legal va en contra de la Constitución. En el mismo sentido se pronunció el senador independiente Emilio Álvarez Icaza.
Es contrario a los artículos 1 y 4 de la Constitución y a la Ley General de Salud. Nuevo León está en el sistema de salud por estar en la Federación. “Aprueban reforma a Ley de Salud en Nuevo León; médicos podrían negar servicio a comunidad LGBT https://t.co/MKE56NLwPs
— José Ramón Cossío D. (@JRCossio) October 22, 2019
¿Qué les pasa?
Esto es absolutamente inconstitucional y discriminatorio…
Que vergüenza
@CongresoNL !Aprueban reforma a Ley de Salud en Nuevo León; médicos podrían negar servicio a comunidad LGBT https://t.co/AYSpNET3t3
— Emilio Álvarez Icaza Longoria (@EmilioAlvarezI) October 22, 2019
Hasta el momento el gobierno de Nuevo León no ha emitido ninguna postura respecto a las reformas aprobadas por el Congreso estatal.
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