La UNAM busca coordinarse con otras instituciones educativas y con las autoridades estatales y locales para erradicar a los grupos porriles, un “antiguo y dañino mal” con el que se intimida a sus estudiantes, informó Leonardo Lomelí Vanegas, rector de la Máxima Casa de Estudios.
El pronunciamiento se da después de los lamentables hechos ocurridos la tarde del 8 de mayo en las inmediaciones del plantel Naucalpan del Colegio de Ciencias y Humanidades, en el que un contingente de porros (según algunas versiones, provenientes de una Vocacional y de un Colegio de Bachilleres) agredió a estudiantes, de lo que resultó un estudiante fallecido por un infarto y varios jóvenes lesionados.
Después del deplorable acontecimiento, tanto padres de familia como estudiantes se han organizado y movilizado para exigir seguridad tanto a los gobiernos como a las instituciones de educación.
Posteriormente, la UNAM publicó una comunicado en el que, además de deplorar los hechos, acusó que lo ocurrido “parece no tener otro propósito que el de desestabilizar a esta casa de estudios ante la proximidad de la jornada electoral del 2 de junio”.
Este viernes el rector de la UNAM dirigió un mensaje en el que se manifestó contra los que denominó “grupos de presión que, desde el anonimato o enfundados en el disfraz de la ‘animación deportiva’, agreden e intimidan a nuestra población estudiantil, particularmente en el bachillerato”.
Para combatir ese “antiguo y dañino mal” que se expresa en “acciones ilícitas, de violencia y acoso en los planteles de educación”, el rector anunció que ya se ha comunicado con Arturo Reyes Sandoval, el director general del Instituto Politécnico Nacional, además de que ha hecho la invitación para coordinarse, además de con otras instituciones educativas, con los gobiernos de la Ciudad de México y del Estado de México, así como con las alcaldías y municipios donde se encuentran sus planteles.
