Más de 400 personas han muerto y seis mil 700 han resultado heridas por el fuerte sismo de magnitud 7.3 que sacudió la frontera entre Irán e Irak, señalaron autoridades el día de hoy.
Hasta el momento, la provincia iraní de Kermanshah, en el oeste del país, se reportó como la más afectada y la agencia estatal de noticias de la República Islámica informó que el terremoto cobró la vida de al menos 400 personas ydejó seis mil 700 heridos sólo en Irán.
Mientras tanto, en Irak, el movimiento telurico causó al menos siete fallecimientos y 535 heridos, todos en la región semiautónoma kurda, en el norte del país.
Las redes sociales en Irán y agencias de noticias mostraron imágenes y videos de personas huyendo de sus hogares en la noche. Más de 100 réplicas han seguido al temblor principal.
Fuentes señalan que los peores daños parecen estar en la localidad de Sarpol-e-Zahab, en Kermanshah, una provincia del oeste de Irán ubicada en los montes Zagros que separan a los dos países.
Ante la magnitud de la tragedia, las autoridades iraníes movilizaron a todos los cuerpos de seguridad, incluidos el Ejército y los Guardianes de la Revolución, para acelerar las tareas de rescate.
La agencia de noticias semioficial ILNA indicó que al menos 14 provincias iraníes resultaron afectadas.
Varios edificios se derrumbaron y por ahora los daños son difíciles de cuantificar, ya que todavía permanecen cortadas las comunicaciones y algunas carreteras difíciles de accesar.
Hasan Rohaní, presidente de Irán, dijo hoy que es “imperativo que todos los organismos competentes y de socorro trabajen en plena colaboración para proporcionar ayuda, alojamiento y atención a los heridos”.
Asimismo, garantizó que su Gobierno apoyará a las víctimas con “todos sus recursos, movilizando todas las capacidades a nivel nacional y local”.
Irán es una zona vulnerable a los sismos debido a su ubicación sobre varias fallas sísmicas importantes.
Con información de AP y AFP
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