El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, defendió el pasado jueves la importancia de un comercio “libre y justo” a la vez que criticó la postura antiinmigrante de su homologo estadounidense Donald Trump.
Durante la conferencia energética internacional IHS CERAWeek que se celebró ayer en Houston, Texas, Trudeau pidió que se reduzca la “ansiedad” de la clase media de EU y que se cuide la mano de obra de los inmigrantes.
“Muchos países han crecido gracias a la migración, pero los desafíos de integración de los recién llegados son mayores, por ello Canadá estableció un sistema de migración basado en méritos que ha sido muy efectivo, que no está definido por su piel, cultura o religión sino por los valores que compartimos. Sin importar de dónde vienes, cuando llegas a Canadá no eres un migrante sino un nuevo canadiense”.
En una conferencia de prensa que ofreció por el Día Internacional de la Mujer, Trudeau también defendió el acceso de las mujeres al aborto: "Cuando se toma un posición contraria al aborto, quitamos a las mujeres el poder de decidir sobre su futuro, con quién, cuándo y cómo quieren comenzar una familia".
Ese mismo día reiteró que su gobierno otorgará 650 millones de dólares canadienses en tres años para "la salud y los derechos sexuales y reproductivos" en los países más necesitados. Esa financiación permitirá asegurar "servicios completos de educación sexual, el reforzamiento de los servicios de salud reproductiva, y el acceso a la planificación familiar y a medios anticonceptivos".
Esto en un esfuerzo por ayudar a prevenir la violencia sexual, "los matrimonio precoces y forzados así como la mutilación genital femenina".
(Con información de EFE y AP)
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