Después de que los resultados de la jornada electoral del pasado domingo en Venezuela favorecieron a la oposición con más de 100 escaños en la Asamblea Nacional (AN), el presidente venezolano, Nicolás Maduro, anunció el pasado lunes, un proceso de reestructuración, por lo que pidió a sus ministros presenten su renuncia.
“Quiero anunciar que producto de todo este proceso de revisión y reimpulso, le he pedido al Consejo de Ministros que ponga su cargo a la orden para hacer un proceso de reestructuración, renovación y reimpulso profundo de todo el gobierno nacional, de todas las áreas del gobierno, de todos los ministerios”, declaró Maduro.
En el anuncio que se dio a través del programa “Contacto con Maduro”, el mandatario agradeció a los ministros por el tiempo que colaboraron con él, a los cuales calificó como hombres y mujeres de trabajo. Además, de que aseguró que el cambio tiene la finalidad de dar un nuevo impulso a la revolución mediante el diálogo con las fuerzas opositoras.
Asimismo, este martes, dijo que no aceptará ninguna ley de amnistía como lo ha planteado la oposición, pues pretenden liberar a los presos políticos entre los que se encuentra el líder opositor Leopoldo López.
"No aceptaré ninguna ley de amnistía. Me podrán enviar mil leyes pero los asesinos de este pueblo tienen que pagar".
La oposición planea liberar a los presos políticos con sus 112 lugares de la AN, ya que de acuerdo con el sistema venezolano las leyes deben ser ratificadas por el presidente, aunque si éste las rechaza, ese veto puede ser superado por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
Y aunque el TSJ es considerado por la oposición como una institución dominada por el Ejecutivo, puede ser reestructurada por la mayoría del parlamento.
(Con información de BBC Mundo)
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