Esta mañana el senado de Brasil validó con 59 votos a favor y 21 en contra la continuidad del proceso de destitución contra Rousseff, es decir, la presidenta está al borde de ser removida de su cargo. La decisión se tomó después de analizar el informé que desató el impeachment, por lo que dieron un paso a la última etapa. Se espera que haya una decisión definitiva el 29 de este mes.
La sesión duró más de 16 horas en un contexto donde, al menos, en 16 ciudades de Brasil hubo manifestaciones de grupos de izquierda que reclaman la salida de Temer del gobierno, al que acusan de golpista y otros tantos defensores de Dilma que pedían su regreso.
Antes de obtener la mayoría de votos que aprobó el juicio final contra la mandataria, la sala escuchó los argumentos en contra y en favor que para algunos ratificó su opinión y para otros la influenció. De esta manera, uno de los razonamientos más fuerte que se escucharon durante la jornada fue el del parlamentario del Partido Social Democrático (PSD), José Medeiros, quien sostuvo que “ella hundió el país y derritió la economía, por lo que no tiene capacidad para dirigir Brasil”.
Mientras el legislador del Partido Socialdemócrata de Brasil (PSDB), Aécio Neves, aseguró que para él “votar a favor del impeachment es defender a la democracia”.
No obstante, Katia Abreu, quien fue ministra de Agricultura de Dilma, y militante del Partido Demócrata Laborista (PDT), aseguró que la presidenta “fue víctima del terrorismo económico, con un Congreso que boicoteaba las medidas planteadas. Para esos legisladores, no importa que el país se rompa en pedazos, desde que estos pedazos estén en manos de ellos”. Más tarde la exfuncionaria subrayó lo siguiente: “a Dilma no la dejaron gobernar desde el primer día en que asumió su segundo mandato”.
Asimismo, el senador Telmario Mota, también miembro del PDT, señaló que “el impeachment es un proceso viciado desde el origen (…) La acción emprendida por una mayoría de congresistas es ni más ni menos que una conspiración”.
El próximo paso será la sesión que a fin de mes deberá sostener el Senado para definir si absuelve o condena a Rousseff, ahora procesada, por supuestamente violar la ley de responsabilidad fiscal de 2015, una acusación que es calificada como un golpe parlamentario por parte de sus defensores.
(Con información de El Clarín)
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