El pasado lunes se llevó a cabo en Bruselas la reunión de los 28 países de la Unión Europea (UE) donde Jean-Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea presentó su plan para reubicar a 160 mil refugiados entre los países del bloque, sin emabargo, no se llegó a ningún acuerdo debido a que las naciones que ya cerraron sus fronteras no están dispuestas a iniciar el diálogo.
El proyecto que planteaba reubicar a los migrantes durante los siguientes dos años no llegó a ninguna conclusión y únicamente dejó programada una nueva reunión para el próximo 8 de octubre, donde el Consejo del Interior (CI) tomará las decisiones basado en la mayoría cualificada.
Pese a que Europa se encuentra en la peor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial con el medio millón de personas que han llegado a Italia, Grecia y Hungría en lo que va del año, los miembros del bloque no pudieron decidir cómo, cuándo y dónde dar asilo a los migrantes.
Alemania, Suecia y Francia, países que hasta el momento han albergado a más persona, son los que se mostraron más conformes con la propuesta de reparto de cuotas que dicta que Alemania y Francia reciban al 46% de los migrantes con 31 mil 443 y 4 mil 931 personas, respectivamente.
No obstante, las naciones se negaron a aceptar por completo el proyecto, además de que fueron incapaces de convencer a La República Checa, Polonia, Rumanía, Eslovaquia y Hungría, quien desde este martes cerró oficialmente sus fronteras, de iniciar el diálogo para llegar a un acuerdo y pronta solución.
El texto consensuado entre todos se sustituyó por una declaración genérica de la Presidencia del Consejo que señala que si en las próximas semanas no se logra que los países que no aceptan a los refugiados en su territorio cedan, será el CI quien tome la decisión, situación que ninguno de los países quiere, puesto que representaría un panorama donde los miembros del bloque están desunidos y pondría en una posición muy incomoda a quienes rechazan a los migrantes.
En la reunión los gobiernos decidieron dar asilo a 40 mil personas, pero no especificaron dónde ni cómo, sin embargo, es importante señalar que Reino Unido, Dinamarca y Austria dejaron claro que no recibirán a más personas.
El ministro italiano, Angelino Alfano, resumió la reunión diciendo que en los “hotspots” o puntos de registro en Italia y Grecia, recibirán ayuda económica para que este en marcha el mecanismo para la repatriación inmediata de los emigrantes irregulares.
Los ministros de Interior de Francia y Alemania, Bernard Cazeneuve y Thomas De Maiziere, explicaron que lo que se necesita es una medida de repatriación.
“Necesitamos un control fuerte de las fronteras exteriores, un dispositivo eficaz. No hay posibilidad de sostener la acogida de refugiados si no se controlan mejor las fronteras exteriores. Se deben tener los medios para organizar la repatriación de los que estén en situación irregular sobre suelo europeo”.
De igual forma aceptaron que ésta no es una solución al problema y que será muy complicado que los refugiados a los que les corresponda ir a destinos menos atractivos por las condiciones sociales quieran ir a un destino diferente a Alemania o Suecia.
“Afrontamos una situación muy difícil y Europa debería ser un continente que dé la bienvenida y les diga a los refugiados que vamos a protegerlos. Pero no puede ser que se ocupen uno o dos países, como Alemania y Suecia, que están asumiendo prácticamente el 50% del total”.
(Con información de El Mundo)
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