Terminado el proceso interno de Morena para definir candidata presidencial, la alcaldesa de Iztapalapa, Clara Brugada, de la vieja guardia obradorista, se destapó oficialmente como aspirante a gobernar la Ciudad de México. Su aspiración no era ningún secreto.
En conferencia de prensa, anunció que pedirá licencia al cargo el próximo 15 de septiembre. “He decidido presentar solicitud de licencia al Congreso de la Ciudad de México para separarme del cargo de alcaldesa de Iztapalapa a partir del próximo 15 de septiembre”.
Ello, con la finalidad de buscar que su partido la nombre candidata a la jefatura de gobierno.
Y se alineó con Claudia Sheinbaum, la virtual candidata presidencial de su partido:
“He decidido solicitar licencia de mi cargo para dedicarme de tiempo completo a fortalecer y revitalizar el movimiento; un gran movimiento ciudadano que promueva y defienda la transformación de la Ciudad de México, promueva los logros del gobierno de la doctora Claudia Sheinbaum y del presidente López Obrador”, dijo obsequiosa.
Se recordará que para la candidatura al gobierno capitalino han sonado varios nombres al interior de Morena: Omar García Harfuch, Rosa Icela Rodríguez (que declinó hace semanas) y Ricardo Monreal, de quien se ha rumorado que recibiría esa candidatura como “premio de consolación”.
Acompañada de legisladores de su partido, dijo que espera que el Congreso apruebe su licencia y saldrá “a caminar” entre los habitantes de la ciudad para conformar una agenda de gobierno.
Según ella, su gobierno es el mejor evaluado de toda la capital. Se ufanó de que logró una sustancial reducción de la incidencia delictiva.
“Soy la alcaldesa mejor evaluada de la Ciudad de México, no porque lo diga yo, lo dicen no sólo las encuestas, sino el INEGI con el 75% de apoyo de la población de Iztapalapa”.
En su lugar, como encargado de despacho quedará Raúl Basurto, director general de Obras. Posteriormente, el Congreso local habrá de nombrar a un nuevo alcalde.
Sobre el conflicto interno que provocó la contienda definida ayer, dijo que espera que Ebrard decida quedarse y llamó a no sembrar “la discordia”.
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