Continúa la disputa por el periodo extraordinario sobre la ley de revocación de mandato: mientras que Morena se apresura tras la orden del presidente Andrés Manuel López Obrador, legisladores del PAN, del PRI, del PRD y de Movimiento Ciudadano se resisten y afirman que el tema será tratado hasta el ordinario de septiembre.
Esto parece ser otro golpe al poder del presidente después de la negativa de Arturo Zaldívar a prolongar su periodo en la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y la caída de José Luis Vargas Valdez de la presidencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
El martes pasado el presidente, durante su conferencia de prensa, denunció que los legisladores convocaban a un periodo extraordinario pero sin incluir el asunto de la revocación de mandato. Acusó que muchos de ellos ni siquiera están enterados del tema, que incluso no quieren la revocación de mandato y hasta cuestionó por qué no quieren que se le pregunte al pueblo.
Eso activó a los líderes de Morena en el Congreso de la Unión, especialmente al senador Ricardo Monreal, que buscó destrabar los obstáculos para realizar el periodo extraordinario para aprobar la ley de revocación de mandato.
El senador Monreal incluso hizo una propuesta de pregunta para la consulta de revocación de mandato: “¿Estás de acuerdo en que el Presidente de la República electo para el periodo constitucional en curso continúe en el cargo hasta que concluya su mandato? Sí o no”.
Previamente el líder de la bancada de Morena en el Senado de la República había presentado una iniciativa de ley de revocación de mandato.
Sin embargo, las intentonas de realizar el periodo extraordinario se han topado con pared. El grupo del PRI ya se ha negado, y quien mejor ha argumentado su negativa es Dulce María Sauri, presidenta de la Cámara de Diputados, quien negó que haya prisa para tratar el tema.
Por el contrario, Sauri afirmó que se tiene que legislar con seriedad y con cuidado, porque se trata de la posibilidad de que el presidente deje su cargo no en 2024, como está establecido, sino en marzo de 2022. Y remató: “Como dice el clásico: ¿Pero qué necesidad?”, resaltó.
Sauri también aclaró al presidente López Obrador que, por razones legales, la consulta para la revocación de mandato no podría ser realizada el 21 de marzo, como él quiere, sino semanas antes.
Por parte del PAN, el senador Damián Zepeda dijo que el tema debe ser analizado con tiempo y con calma, por lo que lo que consideran correcto es que las iniciativas sean tratadas en el periodo ordinario que inicia el 1 de septiembre.
Además, dijo sobre lo dicho por López Obrador el pasado martes: “De repente el presidente truena los dedos y todo mundo tiene que ir a un extraordinario; pero no, no somos sus subordinados. Se trata de legislar bien, no de legislar al vapor”.
A su vez, el senador Dante Delgado, de Movimiento Ciudadano, anunció que su bancada no quiere precipitación ni tampoco una crisis de gobernabilidad por la revocación de mandato, por lo que no aprobará el periodo extraordinario.
Además, Delgado aclaró al presidente “que la facultad de revocar el mandato corresponde a la ciudadanía, y que al Presidente de la República le corresponde gobernar y gobernar bien para todos los mexicanos”.
Por su parte, en entrevista con Azucena Uresti, el senador Miguel Ángel Mancera, del PRD, indicó que el llamado bloque de contención acordó no ir con prisas en el tema de la revocación de mandato.
Indicó que al menos hay cinco iniciativas al respecto, lo que, afirmó, “no se puede desahogar en una sesión”.
