Mientras organizaciones supuestamente independientes de Morena presumen haber recabado 2.1 millones de firmas que apoyan el ejercicio de revocación de mandato, el INE ha encontrado que han “firmado” personas fallecidas o que han perdido sus derechos ciudadanos.
De acuerdo con el coordinador de Procesos Tecnológicos del INE, Alejandro Andrade, se han detectado numerosas irregularidades en el proceso de recogida de firmas por medio de la App móvil.
En entrevista con El Financiero, Andrade dijo que se han localizado “registros no válidos”, como personas fallecidas, personas que tienen suspendidos sus derechos político-electorales (es el caso de las personas presas) o nombres que han sido dadas de baja de la lista nominal de electores.
“Sí tenemos registros que encontramos como no válidos; puede haber varias situaciones: personas fallecidas, personas que les quedaron suspendidos sus derechos políticos o que hemos dado de baja por alguna otra situación, como la pérdida de registro por extravío de credencial”.
A ello se debe agregar un uso inadecuado de la App, como fotografías tomadas a fotocopias de la credencial de elector o a objetos que no tienen relación con el proceso, como una silla.
“Toman la foto a un monitor, a fotocopias de la credencial de elector, y en la fotografía del ciudadano que se tomó, a una persona distinta o hasta un objeto, como una tarjeta de crédito o una silla”.
Se recordará que con la finalidad de maximizar la transparencia en el proceso de recolección de firmas, el INE implementó el uso de una App, algo que provocó protestas de Morena.
Además, la autoridad electoral prohibió que los partidos políticos participaran en la promoción del proceso de firmas, por lo que abrió una convocatoria para que personas físicas y organizaciones civiles participaran como “promoventes”.
Así, ha sido la organización “Que siga la democracia”, vinculada (por sus integrantes) con Morena, la más activa al recoger firmas. Dicha organización ha estado impulsando el proceso de “ratificación de mandato”, de manera ilegal, por lo que ya recibió una orden de dejar de usar ese término y suspender toda propaganda al respecto.
Dijo el funcionario que el INE recibe aproximadamente 40 mil firmas diarias y que el personal encargado revisa lo siguiente: fotografía de anverso y reverso de la credencial, fotografía del ciudadano y firma.
En las fotografías hay múltiples irregularidades y errores. Ello hace que se considere inválida la firma respectiva.
También hay un proceso de recogida de firmas en físico, que deben cumplir diversos requisitos.
Señaló que buscan dar certeza a los promoventes sobre el proceso de revisión de validez de las firmas en físico. Para ello contarán hasta con 300 funcionarios.
Según “Que siga la democracia”, ya están muy cerca de cumplir la meta de 2.7 millones de firmas que establece la ley como requisito para poder efectuar el ejercicio de revocación en 2022.
“Hemos juntado prácticamente las firmas. Estamos alcanzando la meta en cinco estados más: Zacatecas, Tlaxcala, Quintana Roo, Tamaulipas y Chihuahua. Según los cálculos que tenemos, de acuerdo con la participación y el número de firmas que seguimos recibiendo, vamos a alcanzar la meta de 3% en al menos 26 estados”, dijo este domingo Gabriela Jiménez, presidente del organismo, que se identifica como “obradorista”.
Se han entregado cientos de cajas con firmas en físico, además de las entregadas por medio de la App.
Pero, de acuerdo con lo dicho por Andrade, es previsible que no todas las firmas sean aceptadas. Ya se han aceptado 859 mil 620, al último corte, del 10 de diciembre.
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