La Dirección Nacional Extraordinaria (DNE) del Partido de la Revolución Democrática (PRD) celebró la decisión de la Cámara de Diputados de nombrar por unanimidad a los cuatro consejeros que se integrarán al Instituto Nacional Electoral (INE), quienes fueron aprobados por todas las fuerzas políticas por sus perfiles ciudadanos y su experiencia en la materia, lo que garantizará un órgano electoral autónomo e independiente.
Luego de que los legisladores eligieron con 399 votos a favor, cinco en contra y cinco abstenciones, a Norma Irene de la Cruz Magaña, Carla Astrid Humphrey Jordán, José Martín Fernando Faz, Uuc- Kib Espadas Ancona, quienes se sumarán a los siete consejeros ya en funciones, la DNE reiteró la importancia de que el INE siga siendo independiente y que las y los mexicanos continúen depositando su confianza para las próximas elecciones del 2021, donde la ciudadanía ejercerá su voto para elegir 21 mil 368 cargos de elección popular.
En ese sentido, los perredistas subrayaron que la construcción del INE es en buena medida, el resultado de la lucha que emprendió el PRD en favor de las libertades civiles y democráticas, así como de los derechos políticos y electorales.
Señalaron que aún en contra de algunos personajes del partido de Morena, como John Ackerman y Dolores Padierna, los legisladores llegaron a consensos y acuerdos para evitar que se descarrilara el proceso, el cual se llevó a cabo de manera inédita debido a la contingencia del Covid- 19.
Insistieron que es momento de dotar al órgano electoral de gente capaz, sin ningún tipo de cuotas y sometimiento por parte de algún partido o gobierno, ésto con la finalidad de garantizar a las y los ciudadanos el respeto de su voto y de que los procesos electorales se realicen de manera imparcial y transparente.
En cuanto al llamado que hizo el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador a los nuevos consejeros del INE a no someterse, a ser imparciales en favor del pueblo, los perredistas consideraron que no solo los funcionarios electorales deben de cumplir con los principios de la democracia sino todos los servidores públicos, empezando por el propio mandatario federal, quien se ha caracterizado por actuar por encima de la ley y violentar la democracia y los propios órganos autónomos como el INE, con la única finalidad de beneficiarse a él y a su partido.
