A diferencia de Marcelo Ebrard y Ricardo Monreal, que ya hicieron públicas sus respectivas renuncias, la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum esperará al último día para dejar el cargo y así poderse registrar como aspirante.
A un día del Consejo Nacional Morenista, donde fue evidente la cargada en su favor, Sheinbaum dijo que se separará del cargo el próximo viernes 16 de junio, es decir, el último día en que es posible que se registre como aspirante a la contienda interna de Morena.
En su conferencia de mediodía, Sheinbaum violó la ley electoral al promover su candidatura, desde una tribuna pagada con recursos públicos.
Dio por hecho que será la próxima presidenta de México, la primera mujer en ocupar dicho cargo.
Voy en primer lugar en las encuestas y “estoy segura que seguirá siendo así”.
Siguió con la autopromoción al decir que en su gobierno dará continuidad a la “gran obra” del presidente López Obrador, pero su sello propio.
Se ensalzó a sí misma:
“Quiero informar que he tomado la decisión de separarme del cargo de forma definitiva el 16 de junio del presente año con el fin de llegar a ser la primera mujer en la historia de México en encabezar los destinos de la nación”.
“Considero que soy la única persona que estará en la encuesta que proviene de una carrera científica y que al mismo tiempo ha participado en la lucha por los derechos del pueblo”, dijo.
Y dijo que el jueves 15 de junio realizará un “encuentro ciudadano” en el Monumento a la Revolución para hacer un recuento de los avances de su administración.
De hecho, desde hace semanas usa sus redes sociales para difundir datos y cifras favorables a su gestión. A ello se suma la gran cantidad de propaganda que ha aparecido en todo el país.
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