Hace unos días el gobierno federal entregó a la Cámara de Diputados el Presupuesto 2022 y de nueva cuenta observamos que los temas para promover la igualdad entre hombres y mujeres no son prioridad, más bien tendrán recortes o aumentos mínimos que poco ayudan. Aunque, eso sí, para 2022 se impulsa la tasa cero a productos de higiene femenina.
El gobierno federal apuesta a programas sociales y obras monumentales, como desde hace tres años, pero no a preservar la vida, la salud, los derechos humanos, la independencia económica y la igualdad. Se trata de un documento digno de un gobierno patriarcal que sólo nos ve como receptoras de programas sociales y dádivas, lo que abona a invisibilizarnos.
Luego de un análisis a los documentos que entregó el gobierno de la autollamada 4T queda claro dónde sí y dónde no estarán las prioridades de este gobierno, lo que confirma que el panorama para la prevención y atención de la violencia contra la mujer se mantendrá.
Vemos que el dinero fluirá sin restricción alguna en la Secretaría de Salud, donde tendrá un aumento del 27.6%, también aumentan los presupuestos de PEMEX y de CFE. En cuanto a programas sociales, el presupuesto estará distribuido en tres rubros: Pensión para Adultos Mayores (238 mil millones de pesos), Jóvenes Construyendo el Futuro (21 mil millones de pesos) y Sembrando Vida (29 mil millones de pesos), programas que carecen de perspectiva de género y mucho menos son exclusivos para mujeres.
Donde el dinero no esta ni estará es en el Anexo 13, “ De las Erogaciones para la Igualdad entre Mujeres y Hombres de los Proyectos y Decretos de Presupuestos de Egresos de la Federación”, donde los recortes se han convertido en una constante de la administración de quien se autodefine como “el presidente más feminista”.
Se mantiene la tendencia de los presupuestos de años anteriores, es decir que en apariencia hay un aumento de recursos, en general, pero mucho del dinero se inyecta a programas que no están destinados específicamente a mujeres así como en la implementación de nuevos programas, como el de Abasto de Leche, para promover la atención y prevención de la violencia contra las mujeres sólo se tendrá un aumento del 3.4%.
En el rubro de planeación demográfica el recorte será de 60.8%. Aparte, rubros específicos, como Políticas de Igualdad de Género, tienen un aumento de apenas 1.5%; Fortalecimiento de la Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres, del 6.4%, y Fortalecimiento a la Transversalidad de la Perspectiva de Género, 3.8%.
Los recursos para el Fondo Nacional de Emprendedores para mujeres desaparecen definitivamente, al igual que el apoyo a microempresarias y micro créditos a familias.
En implementación de políticas, programas y acciones tendientes a garantizar la seguridad se observa un recorte de 60.8%, mientras que el Programa de Derechos Humanos y de protección y defensa de los derechos humanos bajará 79%.
Tristemente vemos la continuidad de la misma política de no vernos. En ese escenario las noticias para nosotras se ven poco alentadoras.
