Podría ser que el primer viaje del Presidente al extranjero termine siendo al país del presidente que nos trae en la mira, de no ser que hagamos lo que nos pide y exige.
En medio de la incertidumbre y tensiones en que se ha establecido la relación entre los gobiernos de México y EU, López Obrador ya puso mes, septiembre, para el encuentro entre los mandatarios; está por verse es si es allá o acá.
Está en la memoria colectiva lo que pasó la última vez que Donald Trump estuvo en nuestro país, en que todo fue lamentable y vergonzoso. El papel del gobierno de Peña Nieto fue terrible, apuntalado por quien ni siquiera era el canciller. El responsable de todo el desaguisado fue el titular de Hacienda, Luis Videgaray, quien apeló a su cuate Jared, el hijo político de Trump, para que las cosas salieran bien.
Los demócratas estadounidenses y, sobre todo, Hillary Clinton, no olvidan este lance. El hecho se convirtió, a querer o no, en parte del proceso electoral de EU.
Ahora se quiere hacer ver que las cosas son diferentes. Sin embargo, si a alguien le debe quedar claro que con el presidente de EU nunca se sabe, debe ser López Obrador.
En caso de que el encuentro sea en nuestro país, resulta un enigma cuál sería la reacción de la sociedad mexicana. El trato y el discurso que nos ha venido “dispensando” Trump no deja de estar en el imaginario colectivo; suponemos que para el propio gobierno mexicano también.
Es difícil de pronosticar la reacción de mucha gente por más que López Obrador pidiera a sus furibundas huestes que se “serenaran”.
A donde vaya Trump recibe críticas. Su reciente visita a la Gran Bretaña estuvo cargada de incidentes. Las manifestaciones en su contra fueron numerosas y se dejaron sentir y ver por las calles de Londres.
El dilema para el gobierno va ser si el encuentro es en nuestro país y, en particular, en la CdMx. No hay manera de que inhiba cualquier tipo de manifestación y, sobre todo, porque se define como de izquierda. En otro tiempo, no hace mucho, más de algún funcionario del actual gobierno salía a las calles para manifestarse en contra de una visita como la que se pudiera dar en septiembre.
El otro componente del posible encuentro está en lo que pueda pasar para esas fechas, en función de lo que haya hecho, o no hecho, el gobierno de López Obrador en materia migrante. Las presiones no han cesado y todo indica que van a crecer.
No hay día en que no se haga referencia a las fechas que impuso el gobierno de EU para frenar la migración, como si el fenómeno no fuera también corresponsabilidad. El gobierno, se presume, tendrá para esos días resultados, suponemos que por ello López Obrador habla ya de un encuentro entre los presidentes.
El problema que va creciendo en el país, y en la imagen que estamos mandando al exterior, es el costo que está teniendo lo que se está haciendo. Podría estar militarizándose la frontera sur con el nombre de Guardia Nacional, al tiempo que haciéndose un muro, quizá no a la manera de Trump, pero un muro al fin y al cabo.
Quizá por ello el presidente estadounidense, en el acto en Florida en que anunció su intención de reelegirse, dijo, con cierto sarcasmo, que el muro “nos podría salir más barato de lo que imaginábamos”.
La insistencia de López Obrador en no salir del país, lo que incluye la muy importante reunión del G20, lo cual mereció una crítica por parte de la delegación japonesa, no es necesariamente la mejor política interior ni exterior.
Lo que son las cosas: su primera salida al exterior podría ser al país de un presidente que, si algo ha hecho, es tratarnos mal a todos nosotros.
RESQUICIOS.
El video en que se muestra cómo se tortura a un detenido sobre el caso Ayotzinapa confirma lo que se había denunciado sobre el debido proceso. ¿Hay manera de creer en una declaración hecha a una persona a la que le colocan una bolsa de hule en la cabeza, sin dejarlo respirar, asfixiándolo para que los torturadores escuchen lo que quieren escuchar?
Este artículo fue publicado en La Razón el 24 de junio de 2019, agradecemos a Javier Solórzano su autorización para publicarlo en nuestra página.
