En la guerra y en el amor, todo se vale.  Al menos eso es lo que generalmente se piensa y se dice.

Hoy muchos bajan aplicaciones para encontrar el amor verdadero. ¿verdadero? Bueno, al menos un romance ¡o dos!

La era digital trajo consigo cambios en nuestra forma de trabajar, vivir, aprender, viajar, transportarnos, comprar y hasta enamorarnos. Muchas personas confían en que, si no ha sido posible encontrar amor o pareja en la vida offline, es porque los está esperando en la vida online con aplicaciones como Tinder, C Date, Be2, Solteros 50, Lovoo, Happn, Grindr, Badoo, OKCupid y muchas otras. Por cierto, cada vez más segmentadas por intereses, preferencias y capacidades, en estas arenas del romance.

Facebook no se quiere quedar atrás y recientemente anunció su ingreso a este mercado con Facebook Dating, herramienta que funcionaría por separado de tu timeline y contactos. Así, podrás asistir al mismo evento y stalkear a gusto con ese nuevo oscuro objeto del deseo y, por supuesto, asegurar que viva cerca de ti, sea de tu misma religión, sean afines en número de hijos, edad e incluso estatura.

Además te garantiza que los usuarios no coincidan con tus amigos, ¡por aquello de la privacidad o de la quemada social!

Fuente: Grupo Digital de Resonancia informativa

Pero espera ¿qué no fue el propio Facebook el que perdió 37 mil millones de dólares en un día, gracias al escándalo que protagonizó junto con Cambridge Analytica?

Así es, Facebook sirvió de fuente de información para recolectar datos privados de millones de usuarios que, sin su consentimiento, fueron usados para manipular a los votantes de las elecciones de Estados Unidos en 2016, donde Trump resultó ganador.

¡Protégete!

La lógica indica que si lo que buscas es alguien que te quiera, por supuesto si nos referimos a tus datos, hábitos de vida y usos de productos, facebook te querrá re-bien.

Ahí podrás encontrar un sinfín de oportunidades para ser estafado por personas con identidad falsa (Catfishers) que te será imposible reconocer, ya que tienen todas las capacidades que les brinda la inteligencia artificial. Sus bots podrán incluso chatear contigo en tiempo real y en docenas de idiomas para mantenerte ilusionado, entretenido y muy enamorado.

Facebook y Twitter se han enfocado mucho en este año en eliminar millones de cuentas falsas que coexisten en sus redes y que son controladas por manipuladores sociales, estafadores, delincuentes y agresores sexuales. De esta forma las plataformas buscan atacar el fraude de este tipo de personas, aplicaciones falsas y retomar la confianza de la gente en sus plataformas.

No podemos dejar de lado que en el pecado llevan la penitencia.

Han sido ellos quienes inventaron la popularidad digital, motivada por el valor político y comercial que da a los usuarios lograr contar con miles de seguidores.

Fuente: El Comercio

Amor a varias vistas

De acuerdo con el estudio realizado por la empresa de seguridad digital PerimeterX, la tasa de clics a enlaces recibidos por hombres en aplicaciones de citas es de 70%. Ellos, en su gran mayoría, son bots que tienen como similitud el que usan mensajes casi idénticos, sus perfiles no coinciden con los que promocionan en otras redes sociales y su información personal es ficticia.

Por lo regular los bots de estas aplicaciones roban perfiles de otras personas y son un anzuelo para llevarte a otras páginas de citas, pornografía o a seguir la conversación vía Skype.

Antes de morder la manzana prohibida, te recomiendo verificar la información de registro de tu “conquista” para corroborar que su información sea real.

Si estás decidido a buscar el amor o romance en línea, existen sitios como www.scamadviser.com que utilizan algoritmos para determinar si los sitios web que visitas son legítimos o apócrifos.

Es cierto que el amor es una cosa esplendorosa.

Sin embargo, en esta era digital no sólo debes aprender a protegerte de enfermedades de transmisión sexual sino también de Enfermedades de Transmisión Digital (ETD) para que no te rompas el corazón, la cartera y la reputación.

Por lo que a mi respecta, querido lector, en esas apps no me encontrarás jamás.