Las campañas electorales para renovar gubernaturas en Nayarit, Coahuila y Estado de México el próximo domingo 4 de junio, se inspiran en un común denominador, corrupción e inseguridad.
De hecho, a México lo atraviesa la misma daga. Los jóvenes gobernadores que ocuparon el país producto todos del revulsivo llamado alternancia, con el PRI sin presidente y la sociedad más comunicada en lo general, han sido un fiasco.
Ladrones sin escrúpulos, perversa combinación de edad y poder, si a Veracruz, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León o Nayarit los mandatarios llegaron rozando los 40, el gen político del cual emergieron, los condicionó a robar mucho y robar rápido, un sexenio, no más.
Fortunas y entramados patrimoniales exhiben mal los esfuerzos institucionales, declaraciones patrimoniales, de relaciones o intereses, a cada cerradura le encontraron llaves, métodos para esconder el botín encapsulado para no recuperar lo robado.
Gobernadores atareados en robar, fiscales, policías y jueces al servicio de la ilegalidad organizada corroen instituciones y sociedades peor que muchos otros lastres sociales.
Hoy, corrupción, impunidad, inseguridad y violencia, construyen las campañas y discursos. Mañana orientarán el voto.
Nayarit no le pintaba mal al PRI, que dice Enrique Ochoa Reza quiere ser partido alejado de la corrupción, pero con la detención en Estados Unidos de Edgar Veytia, mano derecha del gobernador, Roberto Sandoval, la perspectiva del candidato cenecista Manuel Cota se mira cuesta arriba.
En Coahuila, los finos relojes del candidato tricolor Miguel Riquelme presumidos por el político en sublime ejemplo del “no entienden que no entienden que un político pobre no es un pobre político”, más las historias de poder, violencia y dinero de la familia Moreira tras 12 años en el poder, cambian la perspectiva electoral.
En el Estado de México decíamos que las encuestas serán una batalla por sí mismas, El Financiero publicó ayer que Del Mazo va adelante, SDP Noticias-Televisa en singular medición vía Facebook, opone que es Delfina Gómez la que va en la punta. Segundo día y dos encuestas, sume las de hoy, mañana y así.
Policías de Ecatepec resguardando, por contrato, varias instalaciones federales en la CDMX sin cuentas mayores.
Asesinatos de periodistas, el cierre del diario Norte de Ciudad Juárez, ficha roja de Interpol para localizar a César Duarte, veladoras ardientes para dar con Javier Duarte, un jarocho juez que exime a la libido sin freno de un Porky violador.
Inseguridad y corrupción, corrupción e inseguridad, acopio simplista que dicta propuestas de campañas electorales, cárcel al bandido y lupa a la cama para saber con quién duerme uno.
Con los precriterios económicos de Hacienda para 2018, el horizonte pinta un tercer sexenio consecutivo creciendo al 2 por ciento anual con la inversión pública cayendo sistemáticamente en el mismo periodo, con la utilidad de las reformas embargadas, las campañas presentes y futuras, tienen líneas discursivas definidas.
Este artículo fue publicado en La Razón el 04 de marzo de 2017, agradecemos a Carlos Urdiales su autorización para publicarlo en nuestra página.
