La economía mexicana, sin gasto contracíclico, sin estrategia definida para una senda de crecimiento, apuesta al programa de vacunas mediante “servidores de la nación”. Pero la principal tabla de salvación es la recuperación de la economía estadunidense.
El gobierno del presidente López Obrador carece de una política a favor del consumo interno (con crisis de empleo y sin ayuda en el gasto). Tampoco logra dinamizar la inversión pública (de las más bajas) ni la inversión privada (que se detiene por cambios en las reglas del juego y sectores lastimados por la pandemia sin apoyos).
Sin consumo e inversión dinámicos, sólo queda exportar al mercado de Estados Unidos.
La única salida realista para la economía mexicana es la reactivación estadunidense. Nuestro principal socio comercial tendrá como presidente a Joe Biden, quien pudo obtener el megarescate de 1.9 billón de dólares para su economía. Y el gobierno del presidente López Obrador se está peleando con el principal socio para obtener una reactivación de la economía mexicana.
IFT, COMPROMISO EN EL CAPÍTULO 18 DEL T-MEC
El mandatario mexicano quiere desaparecer los órganos autónomos. Más allá de los tintes centralistas, que llevarán a la concentración del poder y menos transparencia informativa, el gobierno mexicano irá contra el T-MEC.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones, mediante su presidente, Adolfo Cuevas, ha explicado que dentro del Capítulo 18.17 del T-MEC, México se comprometió a mantener un órgano autónomo de telecomunicaciones. El compromiso lo conocen las empresas de telecomunicación estadunidenses, en particular AT&T, la cual ha entrado a México con más de siete mil millones de dólares.
Además, el IFT ha dado resultados en la apertura de mercados y en mejorar el precio de servicios y calidad para los consumidores.
ENERGÍA, DE POMPEO A EBRARD, PASANDO POR NAHLE
El gobierno del presidente López Obrador también tiene problemas con Washington en energía. La carta que enviaron Mike Pompeo, secretario de Estado; Wilbur Ross, secretario de Comercio, y Dan Brouillete, secretario de Energía, a sus contrapartes mexicanos (Marcelo Ebrard, Tatiana Clouthier y Rocío Nahle), lo dice todo: México está incumpliendo el acuerdo comercial en materia energética.
Rocío Nahle, la secretaria de Energía de México, contestó que nuestro país es libre de tomar decisiones en materia energética, sobre todo porque así lo expresa la Constitución. Sólo que México se comprometió a respetar las inversiones energéticas de EU y no lo está cumpliendo: frenó las subastas en aguas profundas para extraer petróleo (buscando favorecer a Pemex) y va contra las energías renovables (para favorecer a la CFE).
AGENDA RIESGOSA PARA LA RECUPERACIÓN
López Obrador eligió tener rispidez con el gobierno de Biden. También lo vimos en el tema de seguridad. Joe Biden toma posesión este miércoles y México traerá abiertos los expedientes de energía, telecomunicaciones, seguridad, laboral y seguridad. Son demasiados temas riesgosos para México. Nuestra economía dependerá de la economía estadunidense para su recuperación, porque el mercado interno está y seguirá deprimido. Y con el socio nos estamos peleando.
Este artículo fue publicado en Excélsior el 18 de enero de 2020. Agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.
