Todos sabemos el papel de Malinche durante la conquista española. Nació entre los hahuatls alrededor de los 1500 en Veracruz y muy joven conoció a Hernán Cortés con quien tuvo un hijo, Martín, considerado uno de los primeros mestizos, pero sobre todo, a quien acompañó como intérprete y consejera del conquistador. Hay quienes valoran ese desempeño aunque la historia oficial la defenestra.
Nació en Oluta, Veracruz. Fue nombrada Malinalli en honor a la diosa de la hierba. Murió su madre y la nueva esposa de su padre la vendió a quienes la entregaron como esclava a Cortés luego de su victoria en Tabasco alrededor de 1519. Malinche fue bautizada y por eso se llama Marina.
Para Rosario Castellanos, Malinzi fue víctima, no traidora. Para la mayoría de los mexicanos es traidora.
En ese mismo tiempo, entre 1495 y 1538, vivió otra mujer clave en el mestizaje en Cartagena de Indias. Es conocida como la India Catalina. Si Malinzi fue hija de caciques, Catalina fue su sobrina y ella, como la Malinche, fue intérprete eficaz de los españoles con los indígenas y también, como Marina, se enamoró del conquistador Pedro de Heredia aunque luego se le rebeló porque, según ella, Heredia había robado oro.
De niña, Malinche fue vendida y Catalina secuestrada por el conquistador Diego de Nicuesa y fue conducida a Santo Domingo donde recibió la formación católica.
Según especulaciones las dos pudieron estar en España pero eso no se ha probado.
En México, predomina la idea de que Malinche fue traidora. En Colombia predomina la idea de que Catalina fue una gran pacificadora y promotora del mestizaje.
