Frente a casi 200 amparos y una controversia constitucional, Rocío Nahle defiende la postura del gobierno federal: Se tenía que hacer algo porque era un desorden el sistema eléctrico. La secretaria de Energía nos menciona que la política de confiabilidad del Sistema Eléctrico Nacional busca poner orden en el exceso de contratos eléctricos, cuando ni siquiera se necesitaban.
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EL MANOTAZO DE LÓPEZ OBRADOR: SE LICITARON, PERO HABÍA CORRUPCIÓN
Es Nahle. Y también es el propio presidente López Obrador, quien tan sólo supo que la Suprema Corte de Justicia aceptó la controversia constitucional de la Cofece en contra de su política eléctrica, quien solicitó revisar “contrato por contrato”. Dice López Obrador que revisarán el contrato de la CFE con cada una de las empresas de generación.
“Porque los contratos que se licitaban eran unos y los que se firmaban con la CFE eran otros”. Concluye: “había mucha corrupción”.
Y si faltaba meter más leña al fogón de la 4T en contra de los privados, vino Manuel Bartlett, director de la CFE: “Hay toda una campaña mediática donde se dice que se afecta la generación de energía limpia, pero no, el fondo es el combate a la corrupción. Se descubrió fraude en contratos de la CFE con particulares, por ello, el presidente López Obrador informó que se procederá legalmente”.
El manotazo en la mesa de la 4T es en la revisión de contratos. No les cayó bien ni la controversia constitucional de la Cofece, ni tampoco los casi 200 amparos en contra de la nueva política de confiabilidad eléctrica, de los cuales dos de organizaciones, Greenpeace y Defensa Colectiva, ya lograron la suspensión.
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ROCÍO NAHLE: IBERDROLA SABÍA LO DE TUXPAN
Rocío Nahle, secretaria de Energía, defiende su política de confiabilidad del Sistema Eléctrico Nacional, que eleva mucho los costos de las empresas privadas para generar electricidad renovable, poniendo en riesgo los más de 20 mil millones de dólares de inversión en energías limpias.
Nahle nos dice que hubo excesos de empresas, como Iberdrola, que daban por hecho que tenían contratos cuando no los tenían. Así le pasó en Tuxpan, dice Nahle, donde planeó la construcción de una central de ciclo combinado, vapor y gas, pero sin contar con el gas.
El gasoducto es de la CFE. Y la CFE va a construir la planta.
El resultado, Iberdrola deja atrás una inversión de 1,200 millones de dólares en Tuxpan, y ahora la CFE llevará esa inversión.
El gobierno de la 4T considera que están rescatando las empresas del Estado, Pemex y CFE, como empresas estratégicas a favor de los mexicanos. Y aquí habría que evaluar lo mejor para el consumidor mexicano.
Por un lado, sí contar con empresas fuertes del Estado que garanticen la soberanía, pero, por otro lado, también con un mercado privado, y limpio, que le reduzca costos y mejore la calidad al consumidor. Sin embargo la 4T ya tomó la decisión, sólo fortalecer las empresas del Estado.
Este artículo fue publicado en Excélsior el 1 de julio de 2020, agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.
