Sería lamentable que después de los muy interesantes debates en la Cámara de Diputados sobre la Reforma Electoral, se quisiera aprobar la propuesta en automático o que se desechara como parte de la estrategia de la oposición.
Si el Presidente sigue con la idea, como pasó con la Reforma Eléctrica, de no cambiar ni una coma al documento, se seguirá en la misma línea que se tuvo con el anterior parlamento, el cual terminó con un conjunto de muy buenas propuestas que no se atendieron.
Estamos ante una serie de planteamientos que pueden darle forma a reformas que están a la mano llevar a cabo. No dudamos que parte del material terminará por ser parte de debates en instituciones de educación superior para su estudio; es de una riqueza invaluable para los procesos de enseñanza-aprendizaje.
Las y los legisladores de Morena deben tener la sensibilidad para atender lo que han organizado. Por más que muchos de los elementos de la reforma presidencial sean criticados e incluso desechados deberán ser suficientemente claros para entender que se trata de poder instrumentar una reforma que obedezca a los tiempos políticos en que estamos, y que una reforma de este calibre debe ser por principio sujeta de la crítica, análisis y debate.
Es la lealtad al Ejecutivo una forma de existencia de Morena y sobre todo por la forma en que se ha desarrollado la presente administración; el Presidente es el centro de casi toda la vida política del país. Sin embargo, al mismo tiempo es importante entender que esto no significa sumisión por principio. Una revisión detallada de la Reforma Electoral fortalece al partido, a su relación con el mandatario y sobre todo ofrece una alternativa a los procesos electorales del país.
De esto es de lo que se ha tratado el Parlamento Abierto. Es encomiable cómo la representación de Morena en la Cámara ha instrumentado un debate de una riqueza y profundidad de grandes dimensiones, y que, sin duda, permiten crear las bases para ajustar los diseños de los órganos y procesos electorales.
Ayer participamos en una reunión más del parlamento con especialistas de México, Panamá, Colombia, Argentina y Chile. Algunos legisladores mexicanos estuvieron al tanto de la reunión lo que permitió escuchar sus preguntas, las cuales fueron atendidas y respondidas lo que vino a profundizar el debate.
Cada sociedad tiene su propia dinámica. Muchas de las disposiciones en estas naciones no forman parte de nuestra legislación. Algunas tienen segundas vueltas, eligen vicepresidente, tienen una representatividad diferente, pero en esencia compartimos ideas sobre los procesos.
En estos países se considera fundamental que los institutos u órganos encargados de las elecciones sean autónomos. A lo largo del parlamento esta premisa ha sido una constante entre investigadores, académicos y especialistas.
En la reunión de ayer también encontramos coincidencias en aspectos como la crisis de los partidos políticos, la necesidad de una mejor representación, el respeto de las reglas establecidas y también en considerar que los OPLE son estratégicos para las elecciones en los estados. También se hizo referencia a la necesidad de concederle a los ministros de culto sus derechos políticos.
Lo que viene pareciera ser previsible. No se vislumbran acuerdos y no queda claro si el Presidente está dispuesto a entrar al debate a través de los legisladores de su partido.
Por lo pronto, no hay indicadores de que esto vaya a suceder, a pesar de las muy atendibles conclusiones que se han dado en los debates estos días, veremos qué pasa a partir del primero de septiembre.
No nos dé por intentar descubrir el agua tibia.
RESQUICIOS.
Nicaragua está reproduciendo los tiempos de dictadura con Daniel Ortega. La intimidación, agresiones, secuestros y encarcelamientos de opositores es de todos los días, los ataques han llegado a la Iglesia católica. El gobierno de México y el Vaticano andan haciendo como que no ven.
Este artículo fue publicado en La Razón el 26 de agosto de 2022. Agradecemos a Javier Solórzano su autorización para publicarlo en nuestra página.
