La engañifa de la #3de3

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Pan y circo, receta infalible para distraer al pueblo, promotores de la iniciativa #3de3 exhibieron en redes sociales a los senadores del PAN, PRD, PT y Morena que votaron en contra de aplicar, en la ley anticorrupción aprobada, las formas originales que plantearon para que servidores públicos declarasen patrimonio, impuestos y potenciales conflictos de interés.


Temas centrales, la obligatoriedad y el formato, los campos a llenar, el alcance de las preguntas, hasta dónde declarar nexos familiares, laterales, ascendentes o descendentes, como redes propicias para la opacidad y la ilegalidad.


Por cierto, ni en la propuesta original ni en la aprobada, figuraban los “compadres”, ese sólido vínculo religioso en un Estado laico, muy eficiente para hacerla de fachada y prestanombres; pero no nos desviemos.


“Los que votaron a favor y los que votaron en contra… que la Nación se los demande”, tuiteó Max Kaiser, director Anticorrupción del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).


Panistas ausentes, Jorge Luis Preciado, Héctor Larios, José María Martínez y Adriana Dávila. Los perredistas Luz María Beristáin, Benjamín Robles y Alejandra Roldán Benítez. Otros que se negaron a votar: el coordinador del PT, Manuel Bartlett; Layda Sansores; Marco Antonio Blásquez, Carlos Manuel Merino y Héctor Adrián Menchaca.


“Se vencieron varias resistencias en la aprobación de leyes del Sistema Nacional Anticorrupción salvo la publicidad de las declaraciones patrimonial, fiscal y de interés”, sentenciaron tras el balconeo.


Ése fue el circo. El pan (de migajón) es la nula utilidad de dichos formatos, así se hubieran aprobado como estaban, porque la clase política y la subcultura de la opacidad son inmunes a estos esfuerzos sociales, ahora legalizados.


Me explico: De qué sirve la exhaustividad en el cuestionario si las respuestas no se corresponden con la realidad. De nada.


Ya el 12 de mayo en La Razón, Raymundo Sánchez @r_sanchezp escribía en su “Periscopio”, sobre la farsa en que se convertía la declaración patrimonial propuesta por Transparencia Mexicana, Imco o México Evalúa y puso como ejemplo la declaración de Adriana Dávila, la candidata perredista derrotada el pasado 5 de junio en Tlaxcala. Terrenos y casas reportados con valores de unos pocos miles de pesos.


Y no es la única. Si usted revisa las declaraciones patrimoniales de los candidatos ganadores de la pasada contienda, ahí mismo en la página de #3de3, observará que Alejandro Murat ganó como director del Infonavit más de 7 millones 613 mil pesos en un año, es decir, una media mensual de 634 mil pesos; o que habiendo nacido en 1975 compró un terreno en 1986, en Magdalena Contreras, CDMX.


O que el gobernador electo de Veracruz, Miguel Ángel Yunes, haya reportado ingresos netos el año pasado por 1 millón 315 mil pesos, media mensual de 109 mil pesos (sic), incluida su dieta como diputado federal.


Con esas respuestas, las preguntas son lo de menos.



Este artículo fue publicado en La Razón el 17 de junio de 2016, agradecemos a Carlos Urdiales su autorización para publicarlo en nuestra página.

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