Personajes cercanos a Dante Delgado, dirigente nacional de Movimiento Ciudadano, se encuentran involucrados en la estafa de Segalmex, según declaraciones de un testigo colaborador reveladas por Reforma.
Este lunes, el diario reseña las conexiones políticas y personales entre personas involucradas en la estafa de Segalmex y el partido naranja.
Así, de acuerdo a “un empresario y testigo colaborador” llamado Ricardo José Lambretón, el empresario Alejandro Puente, amigo de Dante Delgado, obtuvo contratos de procesamiento de leche de parte del gobierno mediante un soborno al exdirector de la Unidad de Administración, René Gavira.
El soborno fue de 6.7 millones de pesos en efectivo y de acuerdo con el testigo colaborador, la empresa se manejaba a través de prestanombres.
Alejandro Puente es colaborador de Movimiento Ciudadano desde hace más de diez años.
Cabe recordar que en 2020 Mexicanos Contra la Corrupción publicó el reportaje “El amiguismo de Movimiento Ciudadano que redundó en un contrato de 4 mil millones de pesos”, en el que se informó que Liconsa dio dos contratos a una empresa sin experiencia en el ramo lechero. Estos contratos “involucran a personajes ligados a dirigentes de Movimiento Ciudadano”.
“Los convenios beneficiaron a Alejandro Puente Córdoba, un empresario que fue candidato a senador por ese partido político y es papá de una diputada federal suplente del mismo instituto” informó MCCI.
Ya desde entonces, MCCI y ahora Reforma también, recuerdan que Ignacio Ovalle también estuvo vinculado con MC, mediante una organización adherente al partido llamada México con Valores.
La nota de Reforma también menciona la relación con MC de Carlos Manuel Lozano, es director de Comercialización de Segalmex, actualmente preso por la derivación llamada “la estafa lechera” de mil 700 millones de pesos.
Según Lambretón, Alejandro Puente era su socio y le indicó entregarle dinero en efectivo a Gavira, actualmente prófugo. Hubo tres entregas: de 2 millones, 2.2 millones y de 2.5 millones respectivamente. Este testigo estuvo preso y aceptó declarar en contra de su exsocio.
“Puente tenía una oficina en la calle de Tenancingo, en la Colonia Condesa. Él me entregaba allí el recurso y yo lo llevaba al domicilio particular del señor Gavira en Bosques de Minas, en el Estado de México, en los límites de Naucalpan y Huixquilucan, digamos. Allí era su domicilio en aquellos años”, declaró.
Los contratos por los que se dio el soborno fueron los celebrados por Liconsa con la empresa Vicente Suárez 73. Un convenio fue por 191 millones y el otro por 267 millones.
En ambos casos el proveedor incumplió con la entrega, pero aun así recibió el pago.
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