Con la finalidad de nutrir el proyecto IMSS-Bienestar, el presidente Andrés Manuel López Obrador, con el apoyo de legisladores de Morena, se encuentra a punto de apoderarse de 135 mil millones de pesos provenientes del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud que se destina a los estados.
La reforma fue aprobada el pasado 5 de diciembre en el Senado y mañana martes se discutirá en el Pleno de la Cámara de Diputados. Se trata de diversas adecuaciones a la Ley General de Salud, mediante las cuales se federaliza el sistema de salud de los estados y se le da a la federación acceso a los fondos de los estados que no se han adherido al IMSS Bienestar.
Con los estados que ya se han suscrito, los 23 gobernados por Morena, el IMSS Bienestar ya tiene “amarrados” 234 mil millones de pesos. Con el acceso al FASS se agregarían 135 mil millones más.
Según una nota publicada este lunes por el diario El Universal, ese enorme monto presupuestal no será suficiente para cumplir la promesa reiterada de AMLO, ya que según especialistas consultados el IMSS Bienestar no tiene infraestructura para ejercer el presupuesto en beneficio de la población, así que se prevé un notable subejercicio para el 2024.
“Es dinero que se va a quedar estático en un organismo que no tiene los recursos humanos ni materiales suficientes. Tendrá todos los recursos del Fassa, ¿y en qué unidades hospitalarias o clínicas los va a aplicar? Va a haber subejercicio porque no tiene el IMSS-Bienestar toda la infraestructura necesaria para operar este dinero y los estados se van a quedar sin recursos, aquellos que hayan firmado los acuerdos específicos”, señaló el experto Miguel Manrique.
A este respecto, cabe recordar que AMLO prometió que para marzo quedaría andando el sistema de salud “como el de Dinamarca”.
Al tiempo, los estados que no han suscrito el convenio con el IMSS Bienestar quedarán sin recursos para dar atención médica de primer nivel.
Manrique, exjefe de la División de Asuntos Consultivos del IMSS, en entrevista con el diario, dijo que los recursos en poder del IMSS Bienestar, explicó que el convenio con los estados implica que éstos transfieran a la federación tanto sus activos como sus recursos, pero que tal como van las cosas, la promesa de que todo estará listo en marzo no se cumplirá.
“Puede que algunos estados transfieran los recursos, pero para eso tenemos que tener los acuerdos. Si no tenemos el acuerdo específico que refiera que va a transferirse este dinero [del Fassa] y el mecanismo para hacerlo, en realidad no va a pasar mucho o cuando menos lo que dice el presidente de que en marzo de 2024 va a estar, eso te garantizo que no va a ser así”, dijo al reportero Enrique Gómez.
A pesar de que muchos gobernadores han firmado, de cara a la opinión pública, los acuerdos para incorporar a sus sistemas al federal, en realidad los traspasos de activos son mucho más complicados y podrían llevar años. Otro problema, dijo, es el tema laboral, ya que los trabajadores sindicalizados tendrían que dejar de estar adscritos en su estado para convertirse en empleados federales y muchos ven esto con sospecha.
Los trabajadores exigirán que se garanticen sus prestaciones, se homologue su salario y se respete su antigüedad, dijo, lo cual complicará durante mucho tiempo el traspaso, pues se necesitarán negociaciones largas y detalladas.
ofv