El caso contra Jesús Murillo Karam, titular de la Procuraduría General de la República (PGR) en el gobierno anterior, por el caso de los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, empieza a caer: le fue concedida una suspensión por la vinculación que se le había dictado, y este jueves el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) dijo que es “una judicialización débil”.
El pasado miércoles Yazmín Eréndira Ruiz, jueza Décimo Sexta de Distrito de Amparo en Materia Penal, concedió una suspensión definitiva a Murillo Karam por la vinculación a proceso que se le dictó por los delitos de tortura, contra la administración de justicia y desaparición forzada en el caso de los normalistas.
Por lo anterior, el juez de Control que lleva la causa debe suspender el procedimiento hasta el cierre de la etapa intermedia y la FGR puede impugnar el fallo ante un tribunal colegiado. Sin embargo, pese a este primer triunfo legal, el exprocurador debe continuar en el Reclusorio Norte, en donde se encuentra desde el pasado 20 de agosto.
Fue el 24 de agosto cuando el juez Marco Antonio Fuerte Tapia determinó vincular a proceso a Murillo Karam por los delitos antes señalados. Sus abogados han defendido al exfuncionario alegando que las acusaciones están sustentadas sólo en dichos, versiones y conferencias de prensa del propio exprocurador.
Este jueves el presidente Andrés Manuel López Obrador se refirió a la determinación de la jueza, y dijo que Murillo Karam tiene el derecho a defenderse, pero que la fiscalía está presentando las pruebas contra él, y acusó al exprocurador: “Fue el responsable de la fabricación de lo que se llamó ‘la verdad histórica’; es decir, de cómo distorsionaron o cambiaron los hechos. Ocultaron los hechos de lo que realmente sucedió, cómo culparon a otras personas, cómo para sacar declaraciones torturaron a personas, cómo dijeron de que habían quemado a los jóvenes en un basurero, algo que está demostrado que fue falso, y él es responsable. Además, él se asume como responsable; por eso la vez pasada puse las palabras del fiscal donde lo cita a él”.
Y más adelante invitó al exprocurador a la delación: “Que Murillo hable: que diga si se le dieron instrucciones, porque en el documento no aparece como responsable Peña, aparece Murillo”.
También este jueves, el GIEI se refirió a las irregularidades que sobre el caso Ayotzinapa ha cometido la FGR. Francisco Cox señaló la falta del conocimiento del caso de la agente del Ministerio Público que expuso los cargos contra Murillo Karam, lo que, recordó, fue señalado hasta por el juez de Control encargado de la causa.
Pero denunció que en la acusación “se dejaron de incluir evidencias y antecedentes probatorios que hubiesen fortalecido, aún más, la responsabilidad del exprocurador Murillo Karam”.
Agregó que “producto de esta judicialización débil del exprocurador Murillo Karam se corre el riesgo de que posteriormente no se logre una condena, no obstante existir evidencia y prueba de la participación del señor Murillo Karam en la construcción de la mal llamada ‘verdad histórica”.
Y señaló: “Se tiene una atención mayor a la detención que a la condena, que lo que parece importar es la oportunidad fotográfica de una detención, de un inicio de una vinculación a proceso, sin importar el resultado de esa formalización”.
La FGR y el gobierno federal ya tienen la foto.
