Lo que quieren los tequileros

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A inicios de semana vimos declaraciones tronantes del presidente de la Cámara Nacional de la Industria del Tequila. Fueron declaraciones que ondeabanla bandera de batalla frente a lo que los tequileros consideran su principal afrenta hoy en día: los destilados o aguardientes de agave que se hacen pasar por tequila.


Orendain con Ferrari y Torre


La Secretaría de Economía tomó acuse de recibo de inmediato.


Justo este miércoles y jueves el presidente de los tequileros, Eduardo Orendain, revisó los temas con Bruno Ferrari José Antonio Torre, secretario y subsecretario en Economía, respectivamente.


El problema es claro: los destilados o aguardientes de agave, que se hacen pasar por tequila, han estado creciendo hasta llegar a un 17% del mercado de bebidas alcohólicas, haciéndose pasar por tequila.


Claro que la industria trae bastante enojo.


El año pasado se consumieron 524.8 millones de litros, de los cuales 17% fueron destilados de agave que se hicieron pasar por tequila. Es mucho.


Los destilados adquiridos fueron más de la mitad del consumo del tequila.


NOM 186 para destilados de agave


Para evitar que siga tal proliferación de bebidas falsas, el subsecretario Torre ya informó del diseño de la Norma Oficial Mexicana 186.


La NOM 186 será para las bebidas hechas de agave, sean aguardientes o destilados. Se trata de una Norma para las agaváceas, las cuales se producen en muchos otros lugares del país, pero carecen de Denominación de Origen como el tequila.


Tequila sólo en cinco estados


El tequila sólo puede producirse en cinco estados: Jalisco es el único donde todos los municipios pueden producirlo; en Nayarit se puede producir en ocho municipios; en Guanajuato en siete municipios; en Michoacán en 30 municipios y en Tamaulipas en 11 municipios.


Todas las demás producciones fuera de estas áreas geográficas de Denominación de Origen, no son tequila.


Revisarlos en planta, no en etiqueta


Se deben regular los destilados de agave, e incluso ahí hay una discusión fuerte: revisar sólo las botellas, o de verdad ir a las plantas para ver que sean bebidas de agave y no aguardientes de caña de azúcar.


Esto se está viendo en la nueva NOM 186 que está lanzando la Secretaría de Economía y que, en efecto, evitará que las bebidas de agave se hagan pasar por tequila. Por lo pronto, la Cámara del tequila está mucho más tranquila con el diseño de la nueva normatividad.


Reto: eliminar venta a granel


Hoy en día el tequila tiene dos categorías, una 100% de agave azúl tequilana weber, y otra que puede tener un 51% de agave y 49% de azúcar. El problema con este último es su modo de venta: todavía a granel.


La industria del tequila debe dar el salto para dejar de vender a granel y ser sólo embotellada, tal como se hace con la categoría de 100% de agave azul tequila Weber.


Pero su pelea inmediata es impedir que existan bebidas falsas que se hacen pasar por tequila y que aunque vengan del maguey son otra clase de agave, no el cosechado en los cinco estados de Denominación de Origen ni con agave azul tequilana Weber. Es la pelea por la Denominación de Origen, que en el caso del tequila le ha permitido ganar enorme terreno en valor como bebida original y de calidad.


GM y México como productor automotriz


Después de su crisis, Chrysler y General Motors han decidido invertir en México como esquema competitivo a escala global: cerca del mercado estadunidense, mano de obra capacitada… pero hay más: también cadenas de proveeduría, y en los últimos tiempos centros tecnológicos y de capacitación.


Ahora vemos a General Motors anunciar una fuerte inversión de 420 millones de dólares: 220 millones en San Luis Potosí, entre otros motivos para producir su nueva camioneta compacta Trax y ampliar su complejo.


Otros 200 millones de dólares se utilizarán en Silao, Guanajuato, para producir pick-ups.


El sector automotriz es uno de los ejemplos donde México podría ser competitivo, con cadenas productivas, centros de capacitación, facilidades a la inversión productiva y… ¿por qué no? con centros de alta tecnología de punta.


México es el quinto productor automotriz mundial y podría escalar todavía más.



Este artículo fue publicado en Excélsior el 17 de febrero de 2017, agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.

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