En esta biografía corta hablaremos de Rufino Tamayo quien fue un célebre escultor y pintor mexicano, siendo de los más elogiados por relacionar el estilo de lienzo europeo moderno con el mexicano folclórico.
Realizaba pinturas de abstracción figurativa con influencias surrealista, lo que le permitía abrirse un campo artístico gigantesco y bastante reconocido en su país por la enmarcación significativa que dejó en cada pieza en la decidía poner su obras.
Vida temprana
Rufino del Carmen Arellanes Tamayo, nace el 26 de agosto de 1899, en Oaxaca de Juárez, México. Sus padres fueron Florentina Tamayo y Manuel Arellanes, ella era costurera y él era zapatero. Un tiempo después de él nacido su padre abandona la familia, lo que obligó al artista a tomar el apellido de su madre.
Su madre fallece de una tuberculosis en 1911, cuando apenas tenía 12 años, lo que le amerito mudarse a Ciudad de México con su tía para quedar bajo su cuidado, durante ese tiempo viviendo en la capital de su país, ayudaba en el pequeño negocio de frutas de la familia; sin embargo, desarrolló un apasionante atractivo por el arte cuando fue inscrito en una clase.
Educación
A los 15 años fue inscrito a una clase de arte por su tía, quién se quedaba a cargo de él, a raíz de ello desarrolló una pasión por el ya mencionado ingenio. Para 1915, empezó a tomar las practicas más enserio y en 1917, ingresó en la Academia de Bellas Artes de San Carlos. Después de un tiempo estudiando allí, se vio influenciado por el impresionismo, el cubismo y el fauvismo y con la aspiración de lograr más, abandonó la escuela y en 1921, se fue a trabajar para José Vasconcelos en el Departamento de Dibujos Etnográficos en el que finalmente fue nombrado jefe y se interesó por el arte precolombino. Estuvo allí hasta 1926.