La Secretaría de Economía (SE) sufrió un ataque cibernético en algunos de sus servidores, el que fue detectado la mañana del pasado domingo, tras lo cual pidió el aislamiento de sus redes. Aclaró que la información sensible de la dependencia y de sus usuarios no fue comprometida.
La secretaría explicó en un comunicado que a las 10:30 horas del pasado domingo, tras la detección de las irregularidades, su Dirección General de Tecnologías de la Información pidió a sus proveedores el aislamiento de sus redes y servidores. Anunció que se irá recuperando la capacidad operativa de forma segura, paulatina y controlada.
Tras la investigación del ataque, en la que también participó la Oficina de Estrategia Digital de la Presidencia de la República, se hallaron algunos servidores afectados, sobre todo en los dedicados a correos electrónicos y a archivos.
Asimismo, fueron publicados en el Diario Oficial de la Federación los términos de la secretaría, por los que se establece que los plazos de los trámites quedan suspendidos.
Este no es el primer ataque de este tipo en el gobierno actual: antes, en agosto del año pasado, la Secretaría de Seguridad Pública y de Protección Ciudadana había alertado de ataques cibernéticos contra las cuentas de redes sociales de dependencias gubernamentales y de servidores públicos.
Después, en noviembre, tocó el turno a Petróleos Mexicanos (Pemex), que sufrió ataques cibernéticos que fueron neutralizados, aunque llegó a afectar al 5 por ciento de sus equipos de cómputo. Los hackers, según dijeron los funcionarios encargados del caso, pedían 5 millones de dólares en bitcoins, los que se negaron a pagar. Entonces la empresa informó que el funcionamiento de los sistemas de operación y producción de la empresa no estuvieron comprometidos porque, dijo, “están blindados”.
En enero de este año, se reportó una falla en el servicio de la Clave Única de Registro de Población (CURP) por el que varios usuarios dijeron que habían sido borrados de ese sistema. Sin embargo, la Secretaría de Gobernación dijo que se trató de algunas inconsistencias en la entrega vía electrónica y que no habían sido borrados los datos de ninguna persona.
