En un intento de poner fin al revuelo ocasionado por la carta-compromiso propuesta por la Secretaría de Educación Pública (SEP) para que los padres de familia autorizaran el regreso de sus hijos a clases presenciales, tanto la titular de la dependencia, Delfina Gómez Álvarez como el presidente Andrés Manuel López Obrador, incurrieron en contradicciones para tratar de evadir la responsabilidad del gobierno en la emisión de dicho documento e insistir en culpar a los medios de comunicación de difundir una carta supuestamente falsa.
Según la secretaria, la primera carta que se difundió en los medios de comunicación desde el 12 de agosto, era un “borrador” que nunca se hizo público en los canales oficiales de la SEP. En cuanto a la segunda carta, afirmó que era un “documento de trabajo” que se presentó en una reunión con los secretarios de Educación estatales y que sí se difundió de manera oficial para aclarar las “alteraciones” que había en la primera versión que se publicó en la mayoría de los medios de comunicación.
“La carta que emite este periódico es falsa, este documento lo usamos de análisis cuando tuvimos la reunión con los secretarios de Educación de los estados; emiten esta información el jueves y se envía la aclaración de que en primera, no es el documento, que tiene algunas alteraciones”, dijo.
La funcionaria negó que la carta-compromiso tuviera la finalidad de eximir de responsabilidad a la SEP en el regreso a las clases presenciales y trasladarla a los padres de familia, sin embargo, ante la confusión que se produjo por el primer documento difundido en la prensa, se decidió cancelarlo en definitiva. Asimismo, pidió a los medios “ayudar” y ocuparse de cosas más importantes.
“La carta no existe, se elimina, lo que queremos como sociedad es que regresen las clases. El documento que salió fue para aclarar que, en comparación con que dieron a conocer los medios de comunicación, era de trabajo, de análisis.. Pero yo sí pediría que nos dieran también oportunidad de que mejor nos apoyaran ustedes como medios de comunicación a trabajar temas que realmente de verdad son importantes”, manifestó.
Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador acusó que la confusión sobre la carta-compromiso es producto de la politiquería de sus adversarios, incluyendo a los medios de comunicación que están en su contra. El mandatario hizo una prolongada exposición señalando a cada uno de los medios y periodistas que publicaron la “carta falsa”, a quienes responsabilizó de atacarlo por todo, hasta por cortarse el pelo. Por eso, según él, no se les debe tomar en serio.
“Sobre la carta, esto ya debe de entenderse, es producto de la politiquería para ser muy claros. Todos los que le dieron vuelo a la carta son adversarios nuestros, todos…. Cómo tomar en serio algo de quienes constantemente están atacándonos. Si no es por la carta es porque me corté el pelo en la oficina o porque le estamos dando ayuda a Haití y no estamos atendiendo a los pobres de México. Por lo que sea”, se quejó.
Cabe aclarar, como lo documentó etcétera, que la primera carta sí salió de la de SEP y fue la propia dependencia la que la hizo llegar a los medios que se la solicitaron para precisar el punto del decálogo donde se establecía que los alumnos deberían llevar una carta de corresponsabilidad firmada por sus padres. Incluso medios afines al gobierno como Revolución 3.0 y Aristegui Noticias la difundieron.
Más aún, padres de familia a través de las redes sociales difundieron dicha carta y aseguraron que el documento les fue enviado a través de chats que mantienen con autoridades educativas.
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