Lejos del discurso del presidente Andrés Manuel López Obrador, su megaproyecto estrella, el Tren Maya, enfrenta el rechazo de habitantes de la península de Yucatán.
En un recorrido por los cinco estados por donde está trazada la ruta de más de mil 460 kilómetros, plagada de retos y dificultades, quienes viven el avance del proyecto en sus tierras narraron a Latinus los abusos de los que han sido víctimas por parte de los enviados del gobierno federal: pagos escasos o inexistentes, consultas amañadas, asambleas con medias verdades a los pobladores.
Defensores del medio ambiente, la cultura y las tradiciones buscan defender su territorio frente a lo que consideran es un desarrollo con métodos coloniales igual a los de hace 500 años.
El proyecto presidencial avanza y pobladores de zonas como Carrillo Puerto resisten con la advertencia de que por ahí no pasará.
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