A un día de que el Zócalo de la CDMX se viera desbordado por la ciudadanía que exige respeto al INE y a la democracia, el presidente Andrés Manuel López Obrador minimizó la asistencia y se burló de quienes se manifestaron.
Fueron manifestaciones “muy pequeñas”, dijo y en la capital, fueron “como 80 mil, máximo 100 mil”, despreció. También afirmó que con “tanto delincuente de cuello blanco” ahí reunido se “incrementaron los robos de cartera en el Zócalo.
Pero, de acuerdo con diversos medios, la asistencia fue de medio millón de personas.
Según sus cálculos, los “simpatizantes del conservadurismo” en México son “como 25 millones”, por lo que la presencia en las diferentes manifestaciones en decenas de ciudades fue muy poco.
“Lo demás sobre la asistencia cada quien tiene su medición, pues como lo definió la Ciudad como 80 mil, máximo 100 mil, y en otros estados estados sobre todo donde gobierna el PAN que hubo también concentraciones, pero todavía muy pequeñas para lo que representa el potencial conservador en México
Y según él, aconsejó: “Tienen que mover más gente todavía, tienen que ir incrementando su capacidad de movilización porque tienen potencial. Que no dejen de participar, movilizarse, aunque esto es de fatigas”.
Agregó que él y su movimiento llenaron el Zócalo 60 veces, pues “son las manifestaciones más grandes en la historia del país”.
No dijo nada de su bravata de hace algunos años, en el sentido de que a la primera manifestación de 100 mil personas él se iría. Es la segunda gran manifestación, el Zócalo se desbordó, como lo demostraron decenas de videos y la reacción del presidente fue de mofa.
También la emprendió en contra de los oradores de la manifestación, el ministro en retiro Joaquín Cossío y la comentarista Beatriz Pagés.
“Los que hablaron, Beatriz Pagés, pues hija de José Pagés Llergo del Siempre, pero muy priista, muy conservadora”.
“Y José Ramón Cossío, un farsante, abogado, ministro de la Suprema Corte de Justicia en pleno narcoestado, apoyado por Calderón. Nunca dijo nada y él votoó en contra de una resolución para que se castigara a los responsables del incendio de la guardería ABC de Hermosillo donde murieron bebés, niños y él es como la autoridad moral del movimiento, el paladín de la legalidad”.
Pidió a sus colaboradores en la mañanera que le ayudaran a “lamparear” a políticos asistentes a la manifestación, pues participaron en gobiernos anteriores y son “defensores de los fraudes electorales”.
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