Tras el retiro de comerciantes informales de la explanada del Palacio de Bellas Artes mediante un gran despliegue policiaco de las autoridades de la Ciudad de México, la presidenta Claudia Sheinbaum dijo que apoya el ordenamiento pero que no hay que criminalizarlos.
El pasado jueves el Gobierno de la Ciudad de México realizó un aparatoso operativo en el que participaron unos 500 policías y unos 300 funcionarios de la Subsecretaría de Reordenamiento en Vía Pública y la Autoridad del Centro Histórico, con el que retiraron a comerciantes ambulantes de la explanada del Palacio de Bellas Artes y los replegaron hacia la Alameda, de la que también se plantea su retiro.
Desde hace meses los comerciantes informales habían ido colonizando espacios en la Alameda Central, y habían llegado hasta las cercanías del Palacio de Bellas Artes. Fue en noviembre cuando ocuparon la explanada de este importante recinto cultural, cuando menos con la aquiescencia de las autoridades, lo que generó un amplio rechazo.
Ante ello, las autoridades capitalinas se propusieron un reordenamiento, producto del cual ocurrió el retiro de los comerciantes ambulantes de las inmediaciones del Palacio de Bellas Artes. Brugada anunció el propio jueves que “el día de hoy se recuperó Bellas Artes; ya está libre para disfrute de la población. Y así se va ir por todos los cuadrantes del centro histórico”.
“En estos momentos en Bellas Artes se está llevando un gran operativo de orden y seguridad en el centro histórico con el objetivo de que los que viven, caminan, transiten, turistas, ciudadanía en general puedan disfrutar del centro histórico, que es emblemático”, dijo la jefa de Gobierno.
Agregó que “el ambulantaje no puede estar en una situación en la que genere problemas. Se va a cuidar que estos tres aspectos: ambulantaje, seguridad vial y seguridad estén en el centro de la ciudad”.
La alcaldía Cuauhtémoc había llamado a la autoridad central a retirar varios tianguis como el que cercaba al Palacio de Bellas Artes, y también había aclarado que no había otorgado ningún permiso para su instalación.
Tras lo ocurrido, este viernes, en su conferencia de prensa Sheinbaum trajo a colación el asunto mientras hablaba de aranceles y de productos asiáticos, y comentó que respalda lo hecho por Brugada “pues está, digamos, ordenando”.
Sin embargo, aclaró que “no se puede criminalizar al comercio en vía pública” debido a que lo practica “gente que se gana la vida”.
Prácticamente recomendó a Brugada: “Lo que hay que hacer es un ordenamiento, de tal manera que se pueda convivir este comercio. Claro que todos queremos caminar hacia la formalización, pero las personas que se dedican a ello buscan una forma de vida”.
Añadió que no se trata de la comisión de un delito sino de buscar un ordenamiento para que puedan convivir tanto la apreciación del patrimonio cultural de México y “que pueda haber mercancías que puedan ser utilizadas por mexicanos y mexicanas”.
Sin embargo, también debe mencionarse que Morena ha utilizado a algunas organizaciones de comerciantes ambulantes para sus “acarreos” a mítines, actos y votaciones.