Luego de que el portal Latinus demostrara que no hay carritos o estantes móviles en 500 puntos del Estado de México, como se prometió, la presidenta Claudia Sheinbaum dijo que éstos no son propiamente una “Farmacia del Bienestar”.
Sin embargo, cuando presentó este módulo hace unas semanas, el 3 de diciembre, dijo que sí lo era.
Ese día, dijo lo siguiente: “La próxima semana inicia en las Tiendas Bienestar un módulo donde van a poder recoger sus medicamentos. Este pequeño módulo es lo que llamamos Farmacias del Bienestar”.
El diseño del módulo, stand o carrito tiene un letrero que dice con toda claridad “Farmacias del Bienestar”.
Este viernes, argumentó que el “estante que se presentó aquí no es que en particular sea ‘LA farmacia del Bienestar’; es un estante que distribuye medicamentos para el programa Salud Casa por Casa, y le llamamos en el marco de todo el esquema de distribución de medicamentos (sic)”.
“Todo el proyecto integral es Farmacias del Bienestar porque tiene que ver desde la receta de la enfermera en el domicilio del adulto mayor hasta ya ir a recoger el medicamento en el centro de salud o en las Tiendas del Bienestar”.
Según ella, los módulos, que a su decir no son propiamente las farmacias, “tienen todas las condiciones de sanidad que se requieren”.
Sobre la ausencia de dichos módulos, excusó que “apenas este mes empezaron a recetar las enfermeras” del programa Salud Casa por Casa y ese sería el motivo de que no estén funcionando los carritos o “stand especial”, como lo llamó hoy.
“Lo que encontramos más sencillo es que vayan al centro de salud o en los casos sobre todo de zonas rurales, que vayan a la tienda del Bienestar, que son las antiguas tiendas Liconsa, son 26 mil tiendas. Otra opción hubiera sido la farmacia del centro de salud, y para facilitarlo, decidimos un stand especial para poderlo distribuir y se verá cómo funciona en los siguientes meses, porque apenas este mes empezaron a recetar las enfermeras”, indicó.
La prensa le cuestionó si estos carritos o stands garantizan la seguridad de los medicamentos y fue entonces cuando dijo que no son la farmacia, sino un “esquema de distribución”. “Están garantizados quienes distribuyen los medicamentos, porque así debe ser, por Cofepris y tienen todas las condiciones de sanidad que se requieren”, sostuvo.
En lo que no reparó la presidenta es que un esquema de distribución de medicamentos, se llame o no farmacia, debe cumplir con criterios sanitarios y un carrito como el que presentó no lo hace, pues tiene los medicamentos expuestos al sol y al viento.
Dijo que “Farmacias del Bienestar” es el proyecto completo, desde la receta emitida en casa hasta la recolección del medicamento. Agregó que no se tendrán todas las medicinas, sino sólo las que están asociadas a Salud Casa por Casa, que atiende a adultos mayores y personas con discapacidad.
“Son una serie de medicamentos, no son todos los medicamentos, son los que están asociados a Salud Casa por Casa, y están determinados por la Secretaría de Salud y por expertos, como lo hemos dicho, y tiene que ver principalmente con el control de la diabetes y la hipertensión principalmente para los adultos mayores, aunque hay medicamentos adicionales”.
Dijo que se decidió entregar las medicinas en stands porque era muy complejo que el personal de salud llevara directamente los medicamentos.
“Las compañeras, enfermeras, enfermeros, hay también médicas, médicos, no necesariamente se concentran en un lugar y luego ya van a sus visitas, sino que muchas veces salen de su casa y van directamente a la visita”, señaló.
Por ello, “lo que encontramos más sencillo es que vayan al centro de salud o, sobre todo, de zona rural, pues que vayan a la tienda de bienestar, que son las antiguas tiendas de Liconsa que existían y que siempre quedan. Hay una en la localidad donde viven, son 26 mil tiendas de bienestar”.
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